UniVerso: El Periódico de los Universitarios

Una análisis histórico que permite analizar la forma en la que la ética ha influido en la educación cívica, fue presentado en la Universidad Veracruzana por Carlos Cullen, pedagogo y filósofo argentino especialista en problemas educativos.

Cullen, actual director del proyecto argentino «La dimensión ético-política de la categoría de ciudadano y los derechos humanos» explicó que sólo si se considera a la ética desde el punto de vista histórico y se narra su evolución es posible un acercamiento a la comprensión del problema de la educación ética de los ciudadanos.

Carlos Cullen, quien fue invitado a la UV por la Dirección General del Área Académica de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, explicó que la perspectiva histórico-narrativa es la más adecuada para estudiar la ética, porque “cuando nos preguntan quién eres, lo que uno hace es contar una historia, contar quiénes hemos sido a través del tiempo”.

Esta perspectiva, según explicó el especialista en filosofía educativa, tiene la ventaja de que permite “volver a contar la historia” si se omite algún detalle, además, contribuye a entender mejor cuál es la relación entre ética y civismo.

Aseguró que la educación ética y ciudadana no se confunde ni con el mero desarrollo moral evolutivo que alguna vez le va a permitir al niño formar un juicio moral autónomo, ni con el mero derecho natural o ‘presocial’ que define la dignidad del individuo y lo dota de derechos inalienables.

“Ni la ética es mera cuestión de desarrollo, ni la ciudadanía es una cuestión de derecho presocial” enfatizó, pues según explicó, la ética y el civismo son estrictamente históricos, con saberes específicos, por eso sólo se pueden definir contando su historia, siempre abierta a nuevos relatos y significaciones.

Para terminar, recordó que la ética es una reflexión crítica-filosófica sobre la moral o las morales que cada individuo, pueblo o cultura tienen: “lo más importante es que la ética es una disciplina racional filosófica que trata de hacerse cargo críticamente, con razones y argumentos, de lo que todos los hombres sabemos que tenemos: normas, sanciones, premios, etcétera”.