Para
contribuir a la mitigación del cambio climático, impulsando
programas de conservación, reforestación, aprovechamiento
sustentable de recursos renovables, mejoramientos de la eficiencia
energética, así como promover fuentes renovables de
energía, entre otros, instancias federales han implementado
algunas políticas ambientales a fin de fortalecer proyectos
encaminados a la reducción de emisiones y de captura de Gases
Efecto Invernadero (GEI).
Algunas de esas políticas son el Mecanismo de Desarrollo
Limpio (MDL), el Programa GEI y el Comité Mexicano para Proyectos
de Reducción de Emisiones y de Captura de Gases de Efecto
Invernadero (Comogei), según informó Miguel
Ángel Cervantes Sánchez, director General Adjunto
para Proyectos de Cambio Climático en la Semarnat,
durante el taller “Efecto invernadero, cambio climático
y proyectos de mecanismos de desarrollo limpio”.
En el evento organizado por el Centro Virtual de Investigaciones
Multidisciplinarias (Cevim) de la UV el funcionario explicó
que el MDL es un componente importante dentro del “Protocolo
de Kyoto”, el cual ayuda a los países a cumplir con
sus compromisos en la reducción de gases efecto invernadero,
adquiriendo reducciones certificadas de emisiones, algo así
como bonos, de proyectos que ayuden al desarrollo sustentable y
que se lleven acabo en países en desarrollo.
El mecanismo es sencillo, aclaró, “a través
del MDL, un país en desarrollo como México, tiene
la posibilidad de que sus proyectos puedan obtener Reducciones Certificadas
de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (Cers), cuantificadas
en toneladas de bióxido de carbono (CO2)”,
y agregó que éstas puedan venderse a industrias o
instituciones establecidas en países desarrollados que los
utilizan para cumplir sus compromisos de reducciones.
Cervantes Sánchez apuntó que México está
entre los países con mayor potencial de generar Cers:
“El mayor potencial se encuentra en proyectos de energías
renovables, uso de metano o biogás que se genera por descomposición
de materia orgánica, como en rellenos sanitarios y plantas
de tratamiento anaerobio de desechos”.
En el país, puntualizó, una gran barrera para llevar
a cabo proyectos MDL es lo complicado de la legislación para
generar y vender energía y los problemas de presupuesto y
de falta de autonomía o interés económico de
las compañías emisoras como la Comisión Federal
de Electricidad y Petróleos Mexicanos: “México
podría representar entre el uno por ciento y el 10 por ciento
del mercado estimado de Cers, lo que significa un potencial
de ingresos entre seis y 600 millones de dólares anuales”.
Por ello, la Semarnat ha establecido programas que ayuden
a calcular y reportar las emisiones de GEI para preparar inventarios,
identificar oportunidades y proyectos para reducir emisiones GEI
y participar en proyectos de MDL. “para insertarnos en los
mercados de carbono, lo cual ayudaría en la identificación
y promoción de una cartera nacional de proyectos MDL”.
Por último, Cervantes Sánchez señaló
que no menos importantes son las capacidades que se adquieren al
plantear y aplicar proyectos MDL, mismos que hacen conciencia a
todos los sectores sobre el problema global del cambio climático
y nos enseñan los primeros pasos para tratar de mitigarlo. |