Año 5 • No. 161 • noviembre 29 de 2004 Xalapa • Veracruz • México
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Homenajearon a Joaquín Galarza
en Foro Anual de Antropología
Vietnam García León

Quien a lo largo de 30 años de trabajo intenso se dedicó a buscar la clave para el desciframiento de la escritura azteca, con la certeza de que los códices no son simplemente un conjunto de imágenes, sino verdaderos textos, el antropólogo Joaquín Galarza, fallecido el 31 de julio pasado en París, Francia, fue homenajeado durante el Foro Anual de Antropología, que organizó la Universidad Veracruzana (UV).

El método que el doctor Joaquín Galarza desarrolló plantea una nueva teoría con respecto al trabajo con los códices, “es un método que propone leer los códices mediante la identificación de los elementos mínimos de significado, los glifos”, así lo dijo el antropólogo Sergio Sánchez Vázquez, quien participó como invitado en el homenaje a Joaquín Galarza.

Sergio Sánchez Vázquez de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo fue invitado al Foro Anual de Antropología “Docencia, investigación, extensión, difusión y vinculación”, donde participaron el Instituto y la Facultad de Antropología de la UV.

Sánchez Vázquez explicó que la diferencia entre la interpretación de los códices, (método tradicional) de lo que Galarza propuso fue la lectura de los códices a través del “establecimiento de códigos de significaciones en los glifos para poder leer un documento”.

Actualmente el proyecto más importante, que se deriva de las enseñanzas de Joaquín Galarza, quien fuera doctor del Estado Francés en Letras y Ciencias Humanas, es el proyecto de amoxcalli, que dirige la doctora Luz María Mohar Betancur, “que consiste en la elaboración de un glifonario, es decir un diccionario de glifos con la intención de facilitar la lectura de los códices”, explicó Sánchez Vázquez.

Joaquín Galarza nació en San Luis Potosí, estudió en la Universidad Nacional Autónoma de México hasta lograr el doctorado en Letras, cuenta con una abundante bibliografía en francés y en español. En lo que respecta a la investigación sobre el Códice Mendocino generó varios artículos, dos audiovisuales y la conocida película Tlacuilo.

El Instituto y Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana decidieron que como parte de las actividades de clausura del Foro Anual de “Antropología, docencia, investigación, extensión, difusión y vinculación” se dedicarán varias conferencias en memoria de Galarza, quien colaboró desde 1958 del Musèe del l’Homme de París, en donde se desempeñó como consejero científico del Departamento de América en el Laboratorio de Etnología.

Con respecto a la lectura de códices, el investigador del Centro de Investigaciones sobre el Estado de Hidalgo, Sergio Sánchez Vázquez explicó: “Hoy en día tenemos un código incompleto de lectura y lo que se pretende es completarlo para conocer todo el código que facilite la comprensión”.

Para Joaquín Galarza “los códices son fuentes históricas de primera mano en las que las sociedades indígenas, por intermedio de escribas con la habilidad para pintar con gran maestría, dejaron constancia fiel de sus logros y avances culturales y científicos”.

La importancia de los códices tiene implicaciones prácticas actuales como el caso de la prueba documental sobre la tenencia de la tierra, en litigios, pero la mayor importancia radica en la aplicación teórica que “es el avance en el conocimiento de un acervo cultural de gran importancia para los mexicanos, que es donde está plasmada parte de la historia, de la tradición de lo que es realmente ser mexicano”.