Año 5 • No. 194 • septiembre 26 de 2005 Xalapa • Veracruz • México
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Crónica novelada de una migración francesa a nuestro país
Presentaron libro De Barcelonnette llegaron: la generación mexicana
Juan Carlos Plata

Cuenta la historia de una familia de migrantes y refleja a una comunidad de “barcelonetas”, incrustada naturalmente, desde hace años, en México
Barcelonnette es un pequeño poblado de Francia situado en los Alpes, a unos 30 ó 40 kilómetros de la frontera con Italia. Su historia y sus habitantes, sobre todo quienes emigraron a México, son protagonistas del libro De Barcelonnette llegaron: la generación mexicana, de Marcelo Derbez, una crónica novelada de la presencia de originarios de este pequeño pueblo en México, donde muchos encontraron una oportunidad de establecerse, trabajar y vivir.

Durante la presentación en la FILU, el autor explicó que Barcelonnette –o pequeña Barcelona– tiene su génesis en un conflicto entre dos poblaciones del sureste francés que disputaban por ser el centro económico y social de la región, conflicto que se resolvió de manera salomónica edificando esta ciudad justo en medio de esas poblaciones.


José Antonio Nemi Dib (izq.) durante su participación en la FILU.
Los ánimos o las necesidades migratorias de los habitantes de Barcelonnette, a final de cuentas la razón por la que llegaron a México años después, fueron explicadas por Alain Derbez, hijo del autor: “Para tener un ingreso adicional desde hace muchos años, en los meses de otoño, invierno y parte de la primavera, los hombres del poblado viajan a las regiones vecinas y aun más lejos –incluso Holanda y Bélgica– para vender toda clase de objetos, y cosa curiosa, algunos se dedican a dar clases de lectura y escritura, gramática, matemáticas y hasta latín; al finalizar mayo regresan a casa, y así, año tras año, generación tras generación”.

Por algún motivo, añadió, en el siglo XIX la migración se ensanchó en kilómetros y millas náuticas, y en días, meses y años, y llegaron algunos a México, entrando por Veracruz; recorriéndolo todo, estableciéndose en el puerto y más allá.

“Nacen para su nuevo país y también para el que dejaron, los barcelonetas, su orgullosa condición de nuevos mexicanos no los hará perder ni su Francia ni su propia región, aislada en un país no acostumbrado a migrar. La identidad barceloneta se bosquejó, forjó y fortaleció en el siglo XIX, y permaneció durante todo el siglo XX llega hasta nuestros días”.

José Antonio Nemi Dib dijo que en el libro, el autor narra la historia de una familia –los Arnau–, que intenta crecer, hacer fortuna para mejorar sus condiciones de vida en un contexto en el que aparecen los fallecimientos, las penas de amor, el altruismo, los proyectos de servicio, incluyendo una clínica para atender a niños pobres, y los efectos criminales de las dos guerras mundiales que dejaron marcada la vida de cientos de familias, no solamente en Europa sino también en México.

“Lo que yo recupero como lo más importante, es un ejercicio sociológico que aparece claramente en esta novela, que intenta explicar por qué esta generación de barcelonetas, la última, la que tiene protagonismo durante y después de la segunda guerra mundial, tiende a fracasar, a perder su identidad y deja de contar con una importancia que tuvo en un momento, en el que, según los demógrafos, había más de cinco mil familias de barcelonetas en México y habían tenido influencia en todos los ámbitos de la vida nacional, incluyendo al señor Yves Limantour, como ministro del gobierno, primer ministro que consigue un superávit en la finanzas públicas de México” , aseguró Nemi Dib.