Año 5 • No. 194 • septiembre 26 de 2005 Xalapa • Veracruz • México
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¿Qué es para mí la democracia?
Rosario Garelli Parker

El vocablo democracia deriva del griego “demos”= pueblo y “kratos”= gobierno y significa gobierno del pueblo. En la actualidad, el concepto de democracia no sólo incluye una forma determinada de gobierno, sino también un conjunto de reglas de conducta para la convivencia social y política.

La democracia es un modo de vivir basado en el respeto a la dignidad humana, la libertad y los derechos de todos y cada uno de los miembros de la comunidad, así como también es la participación del pueblo en la elección de sus gobernantes por medio del sufragio, pero este modo de vivir y esta forma de gobierno, ¿son en realidad lo que se vive en nuestro país?

Hoy, en México, atravesamos por una gran nube de corrupción, donde la inmensa telaraña del poder es tejida con distintos hilos de diferentes intereses; cuando lo ilegal se funde repentinamente con lo que debería ser legal, la sociedad asume una actitud de desconcierto y parece incrédula y apática; pero también, reflexiona sobre su papel de colectividad o de grupo y cuando se harta de la falta de justicia, tristemente acude a la brutalidad (busca hacer justicia por su propia cuenta), como forma lamentable de desahogo ciudadano.

Para lograr una cultura democrática que se encuentre a la altura de los países desarrollados es necesario llevar a cabo acciones encaminadas a la transformación de la forma de pensar del mexicano, así como a la formación de nuevas generaciones con diferente perspectiva de lo que su país es y los problemas que enfrenta para llegar a esa tan anhelada democracia que tanta falta nos hace.

Lograrlo es difícil, complejo y no existen recetas para ello, es preciso efectuar cientos de experimentos en todos los ámbitos políticos, gubernamentales, institucionales y sociales. Lo anterior puede sonar utópico, sin embargo es necesario tener esperanzas.