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Participan
el MIT y 50 instituciones académicas más
Estudia la UV, junto a Nobel mexicano y la NASA, contaminación
atmosférica Edith
Escalón |
Mario
Molina, Nobel de Química en 1995 por advertir al mundo sobre
el agujero en la capa de ozono, lidera el proyecto |
La
Universidad Veracruzana (UV), única en el país que forma
profesionistas en Ciencias Atmosféricas, se sumará en
2006 a la iniciativa de investigación científica en
materia de contaminación atmosférica generada en megaciudades
que promueve, desde hace más de una década, el mexicano
Mario Molina, quien en 1995 ganó el premio Nobel de Química
al advertir al mundo sobre la existencia de un agujero en la capa
de ozono, resultado de la emisión de gases contaminantes que
las actividades humanas provocan. |
Los
aviones realizarán sobrevuelos en los que medirán
con instrumentos externos la evolución y transporte de contaminantes.
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Apoyado
por el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), la NASA,
y más de 30 instituciones norteamericanas, 20 mexicanas y 10
de países europeos y asiáticos, el proyecto de investigación
–coordinado por el Centro Molina para Estudios Estratégicos
sobre Energía y Medio– busca entender mejor cómo
se generan, dispersan, transportan y transforman los contaminantes
y los efectos que provocan en la salud humana, a partir del estudio
de la segunda megaciudad más grande del mundo: la Ciudad de
México.
En su visita a la UV, Luisa Molina, esposa del Nóbel mexicano
e investigadora del MIT, presentó los detalles del proyecto
a científicos, académicos y estudiantes de distintas
áreas de la Universidad, quienes participarán en la
campaña de mediciones programada para el mes de marzo y en
la que buscarán recopilar la mayor cantidad de información
en cuanto a la presencia de gases, partículas, radiación,
aerosoles, biomasa de emisiones, entre otras actividades. |
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Explicó
que los estudios serán en dos modalidades: aéreos y
superficiales. Los primeros se realizarán con sobrevuelos de
cinco aviones instrumentados, dos de ellos de la NASA, que se encargarán
del estudio de la evolución y transporte de contaminantes a
escala global. Los itinerarios comprenden recorridos de Veracruz-
México-Veracruz y Veracruz-Houston-Veracruz.
Las mediciones superficiales se realizarán desde tres sitios
base: uno dentro de la Zona Metropolitana del Valle de México,
otro en el Estado de México y el tercero en Hidalgo, el objetivo
del estudio es saber qué pasa con las “pluma” de
contaminación que genera la Ciudad de México. |
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Y es que según añadió Sasha Madronich, investigador
del National Center for Atmospheric Research, los modelos meteorológicos
actuales estiman que los contaminantes que esta megaciudad genera
“viajan” hasta el Golfo de México: “Para
corroborar la hipótesis tenemos que saber qué pasa en
este trayecto, lo que implica hacer mediciones muy precisas de los
contaminantes de la atmósfera desde su origen hasta la región
costera y marítima de Veracruz”, comentó.
Su ubicación geográfica, pero sobre todo, la capacidad
científica y académica de la Universidad Veracruzana,
única institución que forma especialistas en Ciencias
Atmosféricas, y cuenta con investigadores expertos en ingeniería,
instrumentación electrónica, matemáticas, física
y muchas otras disciplinas, definió su participación
en este proyecto como institución estratégica.
Juan Cervantes, investigador del Centro de Ciencias de la Tierra de
la UV, comentó que es invaluable la oportunidad de participar
en un proyecto de este tipo, al lado de más de 300 investigadores
de diferentes países, cuyos hallazgos servirán para
el diseño de políticas dirigidas a la mejora de la calidad
del aire en el Valle de México, pero ante todo, un proyecto
que generará conocimientos en torno a la contaminación
atmosférica y sus efectos.
Luego de la exposición, Cervantes comentó que en esta
iniciativa participarán sobre todo alumnos de licenciatura,
aunque no descartó que se integren también los de maestría,
además de grupos científicos y académicos cuyas
líneas de investigación se relacionen con los objetivos
del proyecto denominado Milagro (Megacity Initiative: Local and
Global Research Observations).
Beneficios
del proyecto
Según plantearon el investigador norteamericano Sasha Madronich
y las mexicanas Beatriz Cárdenas y Dora Salcedo, el proyecto
permitirá realizar la primera evaluación regional
de lo que una ciudad puede causar en términos de contaminación;
mejorar el desarrollo de modelos meteorológicos y de calidad
del aire, entender la importancia de las diferentes fuentes contaminantes.
Además, resaltaron la oportunidad única para la investigación
que implica, la colaboración institucional y el uso del instrumental
más novedoso en cuanto a mediciones atmosféricas.
De hecho, señalaron que gran parte del equipo que utilizarán,
tanto en las mediciones superficiales como en las aéreas,
son prototipos que se han diseñado ex profeso para estos
trabajos, o equipos que apenas están saliendo a la luz.
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