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Proponen educación en movimiento vs. niños inseguros
y apáticos
Gina Sotelo
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“En
educación, estamos viviendo un caos que resulta en niños
sedentarios, con problemas en todo su desempeño académico,
cada vez más obesos, desnutridos y con una pereza que les impide
moverse”, aseguró Juanita González Hernández
con respecto al Programa de Enseñanza a través del Movimiento,
presentado en la USBI de la Universidad Veracruzana (UV).
La representante de Pensando, Educando, Capacitando y Asesorando (PECA),
programa que pertenece a la fundación de investigaciones educativas
High Scope, hizo un comparativo de una generación a la fecha
–según explicó– sobre la forma de jugar
que regularmente era en la calle, el parque o el patio de alguna escuela
y que ha cambiado de manera radical.
“Ahora los niños están frente a un monitor o un
juguete al que le aprietan un botón y esa es toda la acción.
Factores como la inseguridad, el que los papás tengan que salir
a trabajar y dejen a los niños en casa encerrados, las casas
que son cada vez más pequeñas, influyen en que los espacios
de juego de los niños sean cada vez menos”, explicó
González Hernández.
El Programa de enseñanza a través del movimiento permite
que los alumnos, sean de la edad que sean, se involucren en actividades
donde tengan que moverse. Hay experiencias específicas en las
cuales el adulto o maestro propone y se les da libertad de que cada
uno de ellos lo haga como pueda. El maestro observa y registra lo
que sus alumnos pueden hacer y a partir de ahí siguen con otras
experiencias.
“El ser humano se empieza a mover desde antes de nacer y una
vez que nace es moviéndose como se desarrolla, como conoce
el mundo. Por eso necesitamos darles muchas experiencias a nuestros
alumnos, para que se sigan moviendo y así se desarrollen mejor”
explicó.
En las escuelas se pretende que los alumnos estén calladitos,
sentaditos y no se muevan: “Estamos robando a éstos la
oportunidad de que se desarrollen, no solamente en deportes, música,
danza o en las competencias que queremos, sino que si los motivamos
al movimiento van a ser buenos también emocionalmente, tendrán
una seguridad y confianza en sí mismos en el especto del desarrollo
de otras habilidades como las de conocer su cuerpo, conocer el espacio”,
enfatizó la académica.
Estos niños no sólo serán buenos en matemáticas
o lecto-escritura, sino en todo lo que implique movimiento: “Nos
movemos para todo, entonces ¿por qué no estimular ese
desarrollo?, pero no como en algunas escuelas se hace que es de manera
aislada, sino darles a los niños la oportunidad de ser participes
de un aprendizaje activo”, aseguró Juanita González.
El aprendizaje activo es el que se involucra con la acción
directa sobre el objeto de conocimiento y después hay una reflexión
de lo que se hace. Así lo explicó la especialista: “El
conocer mi cuerpo, conocer lo que puedo hacer con él y, además,
poder platicar con los demás de lo que puedo hacer con mi cuerpo
es una gran ventaja para que las personas aprendan a desarrollarse
plenamente”.
González Hernández dijo a los padres que deberán
brindarle a sus hijos la oportunidad de que se involucren en algo
que les guste y así, la facilidad de que se desarrollen: “Deberán
detectar cuáles son las fortalezas de cada uno y de acuerdo
con eso, darles más oportunidades y disfrutar juntos de esas
actividades”.
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