Año 6 • No. 217  • marzo 27 de 2006 Xalapa • Veracruz • México
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El Centro de Ciencias de la Tierra lo monitorea
Evitar catástrofes por fenómenos naturales, tarea de la UV en el Pico de Orizaba

Gina Sotelo

 Ningún programa de desarrollo sustentable puede realizarse sin tomar en cuenta los riesgos asociados a diversos fenómenos naturales y derivados de la actividad humana, aseguró Ignacio Mora González, director del Centro de Ciencias de la Tierra (CCT) de la Universidad Veracruzana (UV), quien agregó que la naturaleza de esos fenómenos y la manera de evitar que deriven en catástrofes son los objetivos centrales de los programas de investigación que ahí se realizan.

Interpretar la más imperceptible actividad de un volcán es cuestión de vida o muerte. Los volcanes "avisan" cuando va a entrar en erupción; por ello, de unos años a la fecha se han implementado sismógrafos en la mayoría de los volcanes activos de México, entre ellos el de Fuego de Colima, el Popocatépetl, el Pico de Orizaba –el más alto de México con cinco mil 700 metros sobre el nivel del mar–, el Chichón y el Tacaná.

Se trata de volcanes que en cualquier momento pueden hacer erupción. Afortunadamente, a través de los datos sísmicos se detecta con días de anticipación si tendrá actividad significativa, de ahí la importancia de tener una red de monitoreo sísmico que trabaja de manera permanente 24 horas los 365 días del año.

Por ello, desde 1997, la UV cuenta con el CCT, cuyo Programa de monitoreo permanente de la actividad volcánica del Pico de Orizaba tiene entre sus objetivos el generar datos y conocimientos nuevos sobre la geología de la parte media oriental de México, especialmente los estados de Veracruz y Puebla.

Actualmente existen tres estaciones portátiles de monitoreo
–sismógrafos– en un albergue a las faldas del Pico de Orizaba. Mediante estos sofisticados aparatos se comenzó a medir una serie de eventos que ha permitido el intercambio de información con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED). Las estaciones que registran la actividad sísmica son: Halcón, Halcón II y Chipe.

“La medición de los micro sismos que pueden ocurrir al interior del volcán nos indica su estado de actividad. Nosotros los sismógrafos tenemos una analogía y lo vemos como el ultrasonido de los doctores, no son sonidos ni altas frecuencias lo que detectamos, sino bajas frecuencias que no son ondas ultrasónicas sino ondas sísmicas y nos permite saber qué pasa al interior del volcán”, explicó el director del CCT, Ignacio Mora González.

Las estaciones, a través de la telemetría –tecnología que permite la medición remota de magnitudes físicas por radio y el posterior envío de la información hacia el operador del sistema– intercambian señales entre el CENAPRED y el Centro de Ciencias de la Tierra en Xalapa, agregó Mora González Se comparte información con otras redes de monitoreo como las del Popocatépetl y de ahí se enlaza con una repetidora. Las dos instituciones reciben la misma señal de halcón, aunque también la comparten a través de Internet.

Mora González mencionó que el año pasado se formó un fideicomiso entre Protección Civil Federal, la UV y el Gobierno del Estado de Puebla para el monitoreo del Pico. Con este fideicomiso se adquirió equipo que comparten entre la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), UV y CENAPRED.

“Es un sistema de cómputo en el cual tendremos tres señales idénticas en los tres puntos. Junto con el Instituto de Geofísica estamos haciendo mediciones con estaciones móviles para seleccionar los sitios donde instalaremos una nueva red de monitoreo y así cubrir una gran parte del territorio veracruzano”, explicó.

El CCT cuenta también con un mapa de peligros del volcán Pico de Orizaba, el cual sirve a las autoridades de Protección Civil para crear sus planes de respuesta, localizar rutas de evacuación, albergues, etcétera, y se reparten a la población; éste es resultado del trabajo de investigadores nacionales e internacionales, entre ellos Sergio Rodríguez Elizarrarás, de la UV.

El Centro de Ciencias de la Tierra
Además de lo mencionado, forma recursos humanos especializados en el área, mediante la integración de grupos de trabajo con estudiantes tanto a nivel licenciatura como de posgrado, pone especial énfasis en el estudio de la petrogénesis, estratigrafía y geocronología del vulcanismo cenozoico de la región y define el peligro implicado en los diferentes fenómenos geológicos y su aplicación en los aspectos preventivos.

¿Qué es un volcán?
Según CENAPRED, un volcán es una zona de donde salen materiales calientes (lava, ceniza, rocas, gases, vapores) del interior de la Tierra. Parte de estos materiales se acumulan alrededor del lugar de salida, formando cerros o montañas que llegan a alcanzar grandes alturas. Los materiales calientes pueden salir por grietas o por el cráter, que es un orificio en la parte superior del cerro o montaña volcánica, formado por erupciones anteriores.