Año 6 • No. 233 • agosto 14 de 2006 Xalapa • Veracruz • México
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Coinciden catedráticos y directivos de esta facultad
Deficiente orientación vocacional
satura la carrera de Comunicación

Fernanda Melchor
Académicos de FACICO señalan la necesidad de regular la apertura de escuelas “patito” que ofertan la carrera sin respetar la calidad educativa
Boca del Río, Ver.- La carencia de un adecuado sistema de orientación vocacional en la educación media es, entre otras causas, responsable de que año con año se multiplique el número de jóvenes que aspiran ingresar a la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (UV).

Considerada como una de las opciones educativas de mayor demanda en el estado, y superada sólo por Derecho, Pedagogía y Medicina, la Facultad de Comunicación de la UV convocó, tan sólo este año, a 876 aspirantes a cursar alguna de las dos modalidades de esta carrera “de moda”.

Examinada por catedráticos y directivos de esta casa de estudios, la problemática sale de las aulas para abarcar también a otros sectores vinculados: el sistema educativo, las empresas de comunicación, las instituciones privadas y la sociedad civil.
• Rezago vocacional

Para José Luis Cerdán Díaz, académico de esta Facultad, la carrera de Ciencias de la Comunicación ofrece un panorama profesional tan amplio que por eso interesa “tanto a los que específicamente quisieran cursar la carrera y dedicar su vida a una profesión periodística, como a los que no saben exactamente de qué se trata y vienen a un lugar que, parece ser, les da cabida por su amplio espectro”.

José Luis Cerdán.
A decir del también consejero del Instituto Federal Electoral (IFE), esta carrera sufrió a principios de los ochenta un auge propiciado por el efecto social que tiene el prestigio del trabajo en medios, lo que la convierte en una carrera atractiva y que provoca el apetito de los jóvenes.

Por su parte, Luis Velásquez Rivera, periodista y docente, coincidió en que hay una indefinición en las vocaciones causado por una gran deficiencia en los planes de estudio del sistema educativo en general. Para el columnista, la materia de educación vocacional no ha sido explorada en todas sus dimensiones, lo que se agrava con una completa desvinculación entre los planes de estudio de la educación primaria, secundaria, bachillerato y universitaria, y hace que los talentos se desperdicien.

Asimismo, señaló que dentro del campo de la comunicación existe un gran predominio del trabajo en el periodismo escrito y el periodismo hablado, “donde alrededor de estos espejismos muchas vocaciones se van orientando, creyendo que saliendo de la facultad van a abrirse las puertas de las televisoras y de las estaciones de radio más importantes del país, y que el joven va a ser una figura mediática”. Consideró que, lamentablemente, esto resulta ser una utopía “cuando no hay una madurez, no tan sólo vocacional, sino humana, profesional y moral sólida”.
La indefinición vocacional es causada por la gran deficiencia de los planes de estudio del sistema educativo:
Luis Velásquez Rivera
• Miedo a las matemáticas

Para Genaro Aguirre, académico de la Facultad, parte del problema es que “vivimos en un país donde existen ciertas dificultades en el aprovechamiento académico en áreas relacionadas con las matemáticas y las ciencias duras, y en el imaginario de muchos jóvenes la carrera de Comunicación no implica materias relacionadas con las matemáticas, lo que les facilitaría la obtención del título”.

Mencionó que existen dos aspectos que históricamente pueden ayudar a explicar la demanda de carreras relacionadas con la Comunicación y su consiguiente sobreoferta: una, este desagrado por las disciplinas científicas, y dos, la identificación de la carrera con los medios de comunicación.

“Hace falta un trabajo a nivel vocacional para hacerle ver a los muchachos que la Comunicación no es tan mágica ni tan encantadora, que demanda una serie de competencias y de habilidades que a veces no se tienen, y viene finalmente el desencanto y la deserción”, dijo.

Señaló que una posible solución al problema es “establecer vínculos con todas las universidades que ofrecen Comunicación para generar mejores condiciones de colaboración y programas académicos más fuertes, así como vincularnos más con los sectores productivos y empresariales para saber cuáles son sus reales demandas, sin perder de vista que el egresado de Comunicación debe ser crítico y no un técnico”, finalizó.
• Dinámica económica insuficiente

José Luis Cerdán Díaz señala que la contracción del mercado laboral para el comunicólogo tiene que ver con una dinámica económica del país que no genera los empleos ni el desarrollo suficiente. “La carrera tiene una demanda clara, rotunda, que se ratifica cada año, pero la misma sociedad no responde, desde el punto de vista del mercado laboral, al desarrollo de plazas tal y como lo están demandando las nuevas generaciones, quienes no encuentran un lugar donde ocuparse una vez egresados”. También señaló que existen grandes áreas poco explotadas por los comunicadores: la publicidad, la comunicación organizacional, el desarrollo comunitario, la comunicación política y la investigación social.
Afirmó que los profesionales de la comunicación siguen dependiendo del desempeño tradicional en medios de comunicación y de ciertas áreas del sector público, cuando el mercado tendría que ser mucho más amplio e incluir al sector privado, que también necesita de especialistas en la comunicación.
• Escuelas sin calidad

Por otro lado, los docentes coincidieron en señalar que dentro de la problemática existe un factor que es ajeno a la UV, y que constituyen las escuelas privadas.
“Hay que preguntarnos qué están haciendo las autoridades al dejar abrir, sin una evaluación verdaderamente rigurosa, escuelas ‘patito’ que ofrecen a quienes se quedan fuera de las instituciones públicas un lugar para estudiar Comunicación”, señaló Cerdán Díaz, mientras que Francisco Blanco Calderón, académico de la Facultad, consideró necesario retomar la idea de un Consejo Estatal de Educación Superior, que existía en Veracruz en los años setenta, y el cual aglutinaba a las principales instituciones públicas y privadas del estado.

“En este sentido sí pienso que debe existir un órgano regulador que autorice o desautorice la apertura de nuevas carreras, ya que ahora cualquier institución privada, sin cumplir con las instalaciones, el equipo y los recursos humanos necesarios, pueden ofertar la carrera”, declaró Blanco Calderón.
Comentó que tan sólo durante el pasado periodo escolar, tres nuevas escuelas privadas que ofrecen Comunicación se sumaron a las 11 instituciones ya existentes tan sólo en Veracruz, lo cual es “un fenómeno ilógico en un mercado laboral poco preciso y diversificado, aunque el joven perciba superficialmente una gran gama de alternativas laborales, y eso hace que explote la oferta”.
Genaro Aguirre.