Año 6 • No. 241 • octubre 9 de 2005 Xalapa • Veracruz • México
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La UV, sus libros y sus autores
Luisa Josefina Hernández fertiliza Yerma,
obra maestra de García Lorca

Germán Martínez Aceves

Federico García Lorca era como un torero, todo artista, impecable en su ceremonia para vestirse de luces, dominador del ruedo, de las pasiones, de la poesía en movimiento, del teatro total, del cante jondo, haciendo el paseíllo partiendo plaza y enfrentando al toro en esa danza única entre la vida y la muerte que hacía levantar de los asientos hasta al más indiferente. Era la expresión máxima en el sol o la sombra que podía sacar provecho hasta de la situación más seca, vacía, estéril, yerma.

Entre las publicaciones recientes de la Editorial de la Universidad Veracruzana aparece un trabajo completo e inteligente de Luis Josefina Hernández, que con su vocación de teatro y amor por la literatura, eligió Yerma, una de las obras más representativas de García Lorca, para ofrecernos una lectura que enriquece con su aguda observación, análisis y conocimiento de causa.

El 5 de junio de 1898 nació en Fuentevaqueros, Granada, uno de los más grandes escritores españoles: Federico García Lorca. Bajo cielo andaluz compuso sus poesías que lo convirtieran en uno de los autores más significativos del siglo XX. En medio de escritos, comentarios, conferencias y una vida intensa con alma gitana, también construyó obras teatrales como La casa de Bernarda Alba, Bodas de sangre o Yerma, esta última estrenada en 1934 en Madrid con la actuación central de Margarita Kirgu.

Como señala Luisa Josefina Hernández, citando a la vez a William Blake, García Lorca era el artista total con “posesión de una esencia que se manifiesta en igual calidad en las letras, la música y la plástica”. En el prólogo, que más bien se convierte en un pequeño ensayo, la autora nos describe la viveza que tenía el joven granadino para hace obras teatrales ligeras que después se acercarían a lo culto.

Yerma es un gran personaje perfectamente delineado por García Lorca con el que explora el campo de la sexualidad femenina en diálogos, versos y coplas memorables. Esta obra en tres actos borda sobre la esterilidad y un hijo inexistente está presente como deseo, sueño y lamentación. Para algunos, significaba la representación de la etapa obscura de la dictadura franquista, pero como bien apunta Luis Josefina Hernández “la obra trata de sexualidad, ni duda cabe, y éste es el campo literario y humano más rico que puede existir”.

Yerma busca la fertilidad en medio del desierto que significa su relación matrimonial con Juan. Las mujeres que pueblan la obra son referentes para la protagonista que idealiza a un amante y hasta está dispuesta a llegar a las hechicerías populares para poder embarazarse, pues un hijo, sobre todo en el ambiente rural en el que se desarrolla la historia, es importante como base para la familia y el trabajo. No en balde cantan las lavanderas en el célebre pasaje del segundo acto: “¡Pero ay de la casada seca! ¡Ay de la que tiene los pechos de arena!”.

En este texto nos encontramos con dos genialidades, la de Federico García Lorca y la de Luisa Josefina Hernández, quien nos pone pausas a lo largo de la obra para profundizar en el significado de Yerma. Con ello le rinde un homenaje al autor pero a la vez nos revela sus dotes magistrales que enriquecen la lectura.

Concluye la dramaturga, “Quizá las interpretaciones a favor de Yerma y en contra de Juan vienen de la importancia tradicional que se da al instinto materno y del muy tradicional impulso a sospechar que si un hombre tiene problemas con su mujer no es un verdadero ‘macho’. Ambas tradiciones, como otras que existen en nuestra civilización, deben quedar en tela de juicio, para vivir mejor, sufrir menos, disfrutar del poder de la cordura”.

Una lectura de Yerma de Federico García Lorca de Luisa Josefina Hernández es de la Colección Ficción y se puede adquirir en el Servicio Bibliográfico Universitario, Xalapeños Ilustres 37; en las USBI’s que se encuentran en el estado o en la Dirección General Editorial, Hidalgo 9. Comentarios a esta reseña favor de enviar a gemartinez@uv.mx