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Indispensable
para comunidades rurales de Veracruz que carecen del servicio
Podrían generar agua potable
a partir de energía solar
Edith Escalón
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A
partir de esta alternativa energética es posible purificar
el agua cuando está contaminada y contrarrestar así
las enfermedades que ocasiona |
Comunidades rurales que carecen de agua potable podrían tener
en la energía solar un aliado, ya que a partir de esta alternativa
energética es posible purificarla cuando está contaminada
y contrarrestar así las enfermedades que ocasiona, aseguró
Juan Jorge Hermosillo Villalobos, especialista en aplicaciones de
energía solar.
En la Universidad Veracruzana (UV), el ponente explicó que
las técnicas para potabilizar agua a partir de la energía
solar no son nuevas pero casi nadie las conoce, por lo que su uso
se ha limitado a casos muy específicos.
Cabe recordar que la ingesta de agua contaminada es una de las principales
causas de muerte, sobre todo en infantes, además de provocar
numerosas enfermedades, un problema que se agudiza en las zonas rurales
donde no existe suministro de agua potable y la gente se conforma
con tomar agua “limpia” de los pozos o de las corrientes
de agua cercanas.
“Dos millones y medio de niños mueren al año por
diarrea en todo el mundo, hay que preguntarnos cuántos de ellos
son mexicanos”, reflexionó el ponente, quien además
de participar en la Asociación Nacional de Energía Solar
es jefe del Departamento de Procesos Tecnológicos e Industriales
del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente
(iteso).
Hermosillo Villalobos aseguró que hay poca conciencia de las
enfermedades que se pueden adquirir a través del agua, principalmente
porque pura o contaminada se ve exactamente igual: “La gente
ve el agua transparente y deduce que está limpia, ése
es el gran error, pues los microorganismos no se perciben a simple
vista”.
Explicó que con las técnicas de potabilización
a través de la energía solar es posible lograr tres
efectos: purificar agua contaminada con microorganismos nocivos para
el organismo, destilar agua que tenga minerales indeseables y desalar
el agua de mar habilitándola para consumo humano.
“En Veracruz, por ejemplo, la técnica para potabilizar
agua contaminada podría ser de gran utilidad, pues se trata
de un estado con una riqueza hidrológica envidiable, pero desafortunadamente
muchas de esas fuentes de agua se encuentran contaminadas y, sin embargo,
abastecen a numerosos poblados rurales”, aseguró.
Además, explicó que estas técnicas son viables
sólo en pequeña escala, es decir, en comunidades rurales
que requieren de un suministro limitado, pero que no son factibles
económicamente para grandes volúmenes de agua, como
lo que podría necesitar una ciudad como Xalapa o Puebla, donde
una planta de tratamiento resulta imprescindible.
Respecto de los procedimientos dijo que aunque parecen sencillos,
hay muchos parámetros, geometrías, condiciones y materiales
que hay que estudiar para que las técnicas de purificación
a partir de energía solar verdaderamente funcionen, “por
eso resulta importante que los estudiantes de la UV conozcan estas
técnicas, porque pueden hacerlas extensivas en las comunidades
donde trabajan o realizan servicio social, en las dependencias que
los acogen, o incluso, a futuro, en los lugares que ocuparán
en el campo laboral”, aseguró.
Como ejemplo puso el procedimiento purificador a partir del calentamiento
solar “lo más económico es calentar el agua (con
una especie de calentador solar) hasta una temperatura a la que mueren
los microorganismos, eliminarlos por exposición a radiación
ultravioleta o desalar el agua a partir de instrumentos que permiten
la evaporación y condensación del agua, efecto que la
energía solar no produce en los minerales, que quedan aislados
en el proceso de purificación.
El académico aseguró que la falta de conciencia respecto
de la contaminación del agua y de difusión de éstas
y otras técnicas de purificación provocan que sean contados
los estados donde en verdad se aprovecha la energía solar para
estos fines: “Sólo he visto aplicaciones reales en Baja
California y Sonora, principalmente para desalar el agua de mar y
llevarla a comunidades pequeñas que viven cerca de la costa”.
Curiosamente, dijo, las fuentes alternativas de energía se
conocen más en otros países de Latinoamérica,
como Guatemala, Honduras o Colombia, y países mucho más
subdesarrollados que México, supongo que porque existe una
dicotomía pues, por un lado, nos sentimos un país rico
pero, por otro, tenemos problemas evidentemente derivados del atraso
económico, social y cultural.
Advirtió que la utilización de fuentes alternativas
de energía beneficia también el desarrollo sustentable,
y debería formar parte de los conocimientos generales de educación
ambiental de los mexicanos; incluso, podría ser la base de
una empresa productiva sustentable si algún visionario se percatara
de que crear equipos comerciales de purificación de agua a
partir de energía solar puede ser mucho más que rentable:
“Es una inversión que vale la pena, pues se trata de
una tecnología que ya existe, sólo falta una adecuada
estrategia de mercado”, apuntó. |
Con
las técnicas de potabilización a través de
la energía solar es posible lograr tres efectos: purificar
agua contaminada con microorganismos nocivos para el organismo,
destilar agua que tenga minerales indeseables y desalar el agua
de mar habilitándola para consumo humano |
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