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La salud
bucal de los veracruzanos entra en el común denominador de
la sociedad mexicana. Somos un país que está creciendo
en todos los ámbitos educativos, incluyendo el de salud,
pero podemos notar que las clases más desprotegidas –media
y baja– requieren de tratamientos dentales, mismos que por
su situación económica la mayoría de las veces
son incosteables.
La Facultad de Odontología de la Universidad Veracruzana
(UV), atenta a las necesidades de salud de la sociedad, promueve
cada año programas y acciones encauzadas a implementar una
filosofía de educación en salud, que está dando
resultados; esto se refleja en una mayor difusión de conocimientos
y un creciente interés por la salud dental.
La
Facultad como una gran clínica
Guillermo Hernández Lira, director de la Facultad, habla
de algunas líneas específicas de atención y
promoción dental: “Dentro de las funciones sustantivas
de la Universidad –de inicio la docencia, que se da como algo
inherente– se cumple una segunda función, que es la
extensión de los servicios en vinculación de otros
sectores”.
Menciona que va de la mano de la formación del joven estudiante
de la carrera de cirujano dentista y que de alguna manera se vincula
con la sociedad permitiéndole ser prestador de servicios
desde su formación, de tal suerte que el joven que empieza
desde tercer o cuarto semestre ya está teniendo contacto
con sus pacientes: “Se trata de pacientes que ellos mismos
buscan en la periferia de la ciudad, que se les facilita venir por
la accesibilidad de costos y que de alguna manera tienen la posibilidad
de que se les atienda en nuestras clínicas.”
En la Facultad funcionan seis clínicas odontológicas
que trabajan todo el día y es el primer contacto que los
jóvenes y la institución tiene con la sociedad. De
esta manera se cubren muchas de las expectativas y se cumplen muchos
de los programas de las materias odontológicas: operaciones
dentales, exodoncia, cirugía bucal, parodoncia, periodoncia.
“El joven que cursa el décimo semestre lleva prácticamente
puras clínicas y de alguna manera tiene el contacto directo
con todos sus pacientes. Es el primer nexo que la Facultad tiene
como tal con la sociedad” explica el Director.
Atención
directa a comunidades
Un segundo contacto social es que los universitarios y académicos
van a las colonias, hacen brigadas para cubrir muchos de sus programas.
Cuentan con una moderna unidad móvil que generosamente fue
facilitada por el gobierno federal y el apoyo de la dirección
del Área de Ciencias de la Salud de la UV.
Hernández Lira menciona que los brigadistas acuden a las
colonias a prestar servicio con sus dos unidades dentales sumamente
equipadas con rayos x, eléctricas; esto permite que todas
las personas que no puedan venir a la clínica sean atendidas
en las unidades móviles y así cubrir un amplio sector
de la sociedad que está desprotegido. Es gente que no cuenta
con Seguro Social, ISSSTE u otro servicio básico de salud.
Aliados
del programa Sonrisa Fiel
La actual gestión del gobierno estatal está trabajando
desde hace año y medio en el programa Sonrisa Fiel, que consiste
en hacer brigadas en diferentes municipios del estado y enviar equipos
de trabajo integrados por un cirujano dentista que los representa
y dirige y técnicos dentales, cuya finalidad es trabajar
de manera maratónica para implementar prótesis removibles,
prótesis parciales y totales.
Hernández Lira cita que los universitarios acuden a comunidades
de los municipios que se tienen contemplados: “El gobierno
estatal tiene considerado que a estas fechas se han atendido aproximadamente
cuatro mil personas y la UV ha trabajado muy cercanamente en este
programa, formamos juntos brigadas que se han distribuido a lo largo
y ancho del estado de Veracruz”.
Los
niños como prioridad en salud bucal
La Facultad de Odontología ofrece tres programas educativos:
cirujano dentista, técnico protesista dental y la especialización
en odontología infantil.
En esta última, los estudiantes son cirujanos dentistas titulados
que continúan sus estudios para especializarse en la atención
de niños. La clínica de odontología infantil
trabaja desde hace seis años y se han obtenido muy buenos
resultados al grado que acuden semestralmente unos 200 niños
entre 3 a 11 años que empiezan a mudar dientes.
“Es muy satisfactorio ver el interés de los padres
de familia para acudir a sus visitas y que el niño vaya creciendo
con la mentalidad de que al acudir a una consulta dental no es lo
que vivimos los adultos actualmente. El niño va creciendo
con una educación en salud bucodental”, explica Hernández
Lira.
Añade que cuando el joven tenga contacto con el cirujano
dentista por sí solo, ya no será una visita estresante
o temerosa como la de los adultos: “Al atender a niños
se cumplen dos principios: la formación de nuevos odontopediatras
por parte de la UV, y la educación a padres de familia y
a niños para que vayan creciendo en este ámbito”.
Atención
al alcance de todos
Para el director de la Facultad de Odontología de la UV es
importante hacer una precisión entre lo costoso y lo caro
al hablar de salud dental, pues generalmente los tratamientos bucodentales
se catalogan no como “costosos” sino como “caros”.
El ramo de la salud por trabajar con materiales, insumos y demás
conlleva a elevar costos en los tratamientos. Toda la práctica
privada del cirujano dentista incluye un protocolo que de alguna
manera va incrementando costos y deja muy desprotegida a muchas
clases sociales.
Pero él explica: “En nuestro caso, la Facultad de Odontología
no es una institución que vaya a lucrar, sino que de alguna
manera los costos que tenemos para cada uno de nuestros pacientes
es cobrar un mínimo de derecho de clínica y los materiales
que ocupen los estudiantes o los pasantes en servicio social para
poder realizar los tratamientos dentales; de esa manera, la palabra
costoso pasa a ser accesible”. |