Año 6 • No. 264 • abril 30 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


 Centrales

 General

 Reportaje

 Becas y oportunidades

 Arte

 
Deportes

 
Contraportada

 


 Números Anteriores


 Créditos

  Sonidos volcánicos pueden
alertar sobre erupciones
David Sandoval
El registro de sonido de movimientos sísmicos es usado en modelos físicos para detectar cuándo ocurrirá una erupción
Los volcanes generan movimientos sísmicos de manera constante, que al registrarse por medio de sensores pueden determinar el grado de riesgo de una posible erupción, adelantándose al evento en horas e incluso días; no obstante, en México este tipo de proyectos se encuentra en una fase inicial, manifestó Philippe Lesage, investigador del Institut de Recherche pour le Développement (IRD) de Francia.
En conferencia a la comunidad universitaria, organizada por el Centro de Ciencias de la Tierra de la Universidad Veracruzana (UV), Lesage presentó El canto de los volcanes. ¿Qué nos dicen los temblores volcánicos? y explicó que el seguimiento de los sismos consiste en grabar frecuencias que permiten trazar ciertas regularidades previas a la erupción; un conjunto de elementos que, al desarrollar más investigaciones, pueden ayudar a prevenir muertes y daños a las poblaciones aledañas a los volcanes.

Aclaró que se deben tener instrumentos instalados permanentemente en el volcán y combinar varios métodos para monitorear correctamente; además, se deben instalar dispositivos conocidos como sismómetros
–sensores que detectan el movimiento de la tierra, combinándolo con mediciones de deformación de la estructura volcánica–, también se pueden realizar medidas geofísicas y magnéticas.
Enfocándose en el método sísmico, el investigador explicó que para monitorear se instalan varias estaciones que conforman una red sísmica y puso como ejemplo el caso del Popocatépetl, que cuenta con más de 30 estaciones operando las 24 horas del día durante todo el año, enviando la información recabada en tiempo real al Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED).

Los sonidos que emiten los sismos son grabados por los sensores; no obstante, son imperceptibles para el ser humano en una frecuencia alrededor de los 10 hertz, que al multiplicar la velocidad del audio por 50 o 100 se hace perceptible para el oído humano; para conocer la frecuencia de los temblores volcánicos se requiere de un análisis en el que se detectan las bajas y altas frecuencias, que van desde los 10 hasta los 30 hertz.

El sonido que se percibe es generado por el movimiento de ruptura de la roca sólida, ésta es empujada por la presión del magma, que debido a un incremento en el cono volcánico busca una salida por la parte superior, generando a su paso burbujas de gas que son el primer elemento de una erupción, detalló Lesage.

Las explosiones dentro del volcán generan altas y bajas frecuencias; cuando la presión tiende a aumentar el volcán asemeja una botella de champaña y al liberar las burbujas de gas del interior éstas se expanden, llevándose en este caso el material volcánico.

Las vibraciones generadas por derrumbes de lodo, combinando el agua y la ceniza, ocasionalmente generan altas frecuencias, continúo el académico; también se ha grabado un fenómeno llamado tremor volcánico, es una vibración que puede durar varios minutos, horas o días, e incluso hay volcanes que registran esta condición como permanente; a su vez, estos movimientos registran varias frecuencias al mismo tiempo, denominándose como movimiento armónico.

Tales frecuencias se interpretan por medio de modelos que asemejan a la realidad, en este aspecto son los físicos quienes trabajan por medio de analogías entre casos reales y modelos que simulan el comportamiento de los volcanes, manifestó Philippe Lesage, quien también realiza un programa de investigación en colaboración con el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), denominado “Estudio y monitoreo geofísico de los volcanes activos en México”.

A este respecto concluyó: “Se ha mejorado el método que ayuda a registrar la información y podemos predecir por medio de los modelos el comportamiento de los volcanes”; sin embargo, subrayó: “primero se debe generalizar el monitoreo volcánico, que todos los volcanes activos del mundo tengan un sistema de monitoreo menos limitado, muchos están monitoreados pero algunos todavía no”; una vez que se logre dicha estrategia, continuó Lesage, la predicción de erupciones será más precisa y se podrán salvar más vidas.