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Raquíticos
procesos productivos generan caída de economías locales:
investigador
Alma Espinosa |
En
La Joya, Naolinco y Teocelo se ha reducido la producción de
queso, zapatos y muebles, respectivamente El
diez por ciento de los veracruzanos emigró a la frontera
norte del país o a Estados Unidos |
Darío
Fabián Hernández, del IIESES, dijo que en el estado
existen múltiples economías locales en riesgo
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De
acuerdo con los primeros resultados que arrojó un proyecto
para analizar los factores de desarrollo local de tres poblaciones
veracruzanas, se determinó que los productos artesanales como
el queso de la Joya, los zapatos de Naolinco y los muebles de Teocelo
provocan que la economía local vaya a la baja y que las condiciones
de desarrollo empeoren o decrezcan, aseguró Darío Fabián
Hernández, del Instituto de Investigaciones de Estudios Superiores,
Económicos y Sociales (IIESES) de la Universidad Veracruzana
(UV).
Durante su participación en el Segundo Seminario del Verano
de Investigación que organizó la UV, el investigador
comentó que el proyecto apenas inició con entrevistas
a pobladores de los tres sitios para conocer su problemática
y las propuestas para solucionarlo.
Aseguró que de un primer vistazo el equipo de trabajo aseguró
que se está perdiendo la actividad productiva, causada porque
se dejan de hacer quesos de la Joya, en Naolinco han cambiado la producción
por la compra de zapato en León, Guanajuato, para venderlo
en tierras veracruzanas, y en Teocelo ha bajado a por lo menos la
mitad el número de productores de muebles de bambú.
Todo esto genera que se pierda el factor productivo local.
Aunado a esta información, dijo, se analiza cómo los
datos estadísticos se pueden cruzar con una encuesta y el trabajo
etnográfico, que exige del equipo de trabajo poner alerta todos
los sentidos para percibir la situación y las necesidades de
la gente para contribuir a su satisfacción. Lo que aporta el
equipo son técnicas y métodos de comercialización,
registro de patentes y otras cosas que son importantes para elevar
la economía local.
Darío Hernández adelantó que el proyecto pretende
ampliarse a todo el estado porque hay muchas economías de aglomeración
con estas características. El documento final de cada entidad
se entregará a la Secretaría de Economía y al
gobierno municipal para apoyar su plan de desarrollo; además,
se espera que los resultados beneficien a los productores y asociaciones,
en el caso de que no exista se sugerirá la conformación
de una asociación.
Angélica Gutiérrez Bonilla, directora del IIESES, participó
también en el seminario donde dio a conocer un proyecto para
dar seguridad alimentaria a las familias de 30 comunidades de alta
marginación de la sierra de Papantla. Se les capacitó
para habilitar los traspatios y crear huertos familiares que además
de productos para autoconsumo les permitiera comercializar. La trascendencia
y urgencia de impulsar este tipo de proyectos se debe, dijo, a que
en el 2008 el Tratado de Libre Comercio abrirá las puertas
a Estados Unidos y Canadá en el tema de la agricultura.
El investigador Daniel Romero, también del IIESES, habló
sobre la migración de Veracruz y aseguró que puede decirse
que es nueva porque en los últimos 15 años viajaron
cerca de 800 mil veracruzanos hacia el norte del país y EU,
lo que significa diez por ciento de la población que se asentó
principalmente en Carolina del Norte, Carolina del Sur y Georgia.
Dio a conocer que el migrante veracruzano no creó redes migratorias,
sino que se sumó a las ya existentes y de gran trayectoria
como de Oaxaca, Michoacán y los estados del Bajío. Lo
anterior favoreció a que los veracruzanos se fueran con mayor
facilidad, principalmente de edades entre los 15 y 25 años.
La explicación tiene que ver con la caída de tres fuertes
industrias en el estado: cítricos, café y azúcar,
que aunado a los precios internacionales muy bajos han motivado el
desplazamiento de nuestros compatriotas. Agregó que Veracruz
se mantiene entre los seis primeros estados en recibir remesas. |
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