El género Ficus (moraceae) es uno de los taxa-ecológicamente más complejos e interesantes dentro del grupo de las Angiospermas, distinguiéndose como uno de los elementos más característicos en los diferentes tipos de vegetación de las
zonas tropicales del mundo. Sus más de 750 especies están repre-sentadas tanto en una amplia distribución geográfica, como en variadas formas de vida, incluyendo plantas epifitas, árboles indepen-dientes, lianas y hemiepifitas.

Los árboles hemiepifitos, comúnmente referidos como "matapalos" o "árboles estrangula-dores", son sin duda un componen-te característico del género Ficus, agrupando casi el 50 por ciento del número total de especies; están
comprendidos dentro del subgénero Urostigma y son un ejemplo del alto grado de adaptación de las especies vegetales, en relación a la colonización de los diferentes nichos disponibles y establecimien-to en una comunidad biótica compleja, como es la selva tropical.

Los árboles de Ficus hemiepifitos germinan en los doseles de los árboles hospederos o "forofitos", requiriendo necesaria-mente ser transportados por agentes dispersores, comúnmente mamíferos y aves. Para que las semillas logren germinar es necesario que los árboles hospederos tengan acumulaciones de materia orgánica con alta retención de humedad, además de un acceso constante de luz para su posterior establecimiento. Cuando estas condiciones están disponibles, la plántula, ya establecida, empieza a desarrollar su sistema radicular adhiriéndose cada vez con mayor fuerza a su hospedero, hasta que, finalmente, sus raíces se anclan en el sustrato alrededor del forofito. Posteriormente, las raíces originales de toda la parte aérea se vanengrosando, se anastomosan y transforma físicamente al forofito.

Además de sus especiales formas de vida, los árboles del género Ficus, poseen ciertas peculiaridades biológicas, que los hace diferentes de los demás árboles tropicales. Entre las particularida-des que envuelven a estos árboles, llama la atención la gran diversidad de interacciones que presentan con dispersores y polinizadores, conformando una de las
interacciones planta-polinizador mejor estudiadas. En este sistema, cada una de las especies del género Ficus es necesariamente polinizada por una especie específica de avispa (Agaonidae) la cual sólo puede reproducirse en las
inflorescencias del árbol, donde las avispas depredan una parte de la producción total de las semillas y permiten el desarrollo de otra fracción de la misma producción.

No obstante, la importancia ecológica de este tipo de árboles aún es muy poca la información que se tiene acerca de su biología básica, sobre todo en aspectos como depredación de semillas, germinación y establecimiento, los cuales son aspectos claves para comprender el éxito de colonización de los estranguladores, así como la compleja estructura de la comunidad de un bosque tropical.