Año 2 • No. 65 • junio 10 de 2002 Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


 Páginas Centrales
 
 Información General


 Estados Financieros

 Compromiso Social
 
 Arte Universitario

 Inter Nautas

 Halcones al Vuelo

 Contraportada


 Números Anteriores


 Créditos

 
Fígaro
Tercera Llamada
Jorge Vázquez Pacheco
El espectáculo “fuerte” en Junio Musical, el acontecimiento que aportará la nota dominante es, sin duda, la presentación en Xalapa de la ópera Las bodas de Fígaro, una de las creaciones de mayor celebridad en el catálogo de Wolfgang Amadeus Mozart.
Es bien sabido que una gran parte de la producción de Mozart fue destinada a la voz. De la misma, destacan las óperas escritas hacia la última década de su breve y fructífera existencia, como fueron Las bodas de Fígaro, Don Giovanni y La flauta mágica. Mientras muchos consideran que Don Giovanni es “la ópera” por excelencia en la producción del autor, es en Las bodas de Fígaro donde Mozart imprime un estilo de madurez en que son evidentes los personalísimos contornos de un arte musical que de muchas formas contribuiría a forjar el estilo de las futuras óperas alemanas, al abrirse paso airosamente ante los convencionalismos
propias de la época. Los personajes en Las bodas de Fígaro han sido extraordinariamente moldeados y manejados con mano maestra, de acuerdo a un argumento abundante en escenas chuscas y complicados enredos.
Desde la misma escena inicial, Mozart plantea la desparpajada tónica dominante: dos enamorados, Susana y Fígaro, criados del conde Almaviva, planean el decorado de su alcoba matrimonial a tan solo unos días de su enlace. El conde, que es un enamoradizo incorregible, ha renunciado a su derecho de pernada sobre Susana, pero ésta no pierde de vista que la alcoba que compartirá con Fígaro se encuentra a unos cuantos pasos del alcance del conde. Para colmo, el paje Cherubino adolece del mismo defecto que su amo y no le quita el ojo de encima ni siquiera a la misma esposa del conde. Comienzan los enredos cuando las mujeres se proponen dar una buena lección al donjuanesco conde, a la vez que el paje hace de las suyas con cuanta dama se le pone enfrente. Cuatro actos de agitada acción culminan con el perdón de todos y para todos, y la dura moraleja de que nadie puede esperar resultados benéficos de un proceder infiel.
El libreto en idioma italiano fue de Lorenzo Da Ponte, basado en la segunda parte de la trilogía creada por Beaumarchais sobre el personaje de Fígaro. La obra se estrenó en mayo de 1786, casi cinco años antes de la muerte de Mozart, en el Burgtheater de Viena.
Para la recreación de los personajes se contará en Xalapa con cantantes de primer orden, como el barítono de Coatzacoalcos Genaro Sulvarán, cuya carrera internacional le consolida día a día como un artista de alcances supremos, al igual que la soprano María Luisa Tamez y la mezzo Encarnación Vázquez. El elenco se complementa con la presencia de la soprano Lourdes Ambriz, el barítono Jesús Suaste y el tenor José Guadalupe Reyes, así como los integrantes del Coro de la uv. La dirección musical será de Carlos Miguel Prieto, mientras que la dirección escénica correrá a cargo del experimentado José Solé, con iluminación de Guillermo Barclay.
Las funciones para Las bodas de Fígaro se programaron para el viernes 14 a las 20:30 horas, y el domingo 16 a las 18:00 horas, en la sala grande del Teatro del Estado. Te sugerimos no perder de vista este acontecimiento.