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Golpe de calor
Susana Vázquez |
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Cuidado
con los golpes de calor, si no hay motivo no te expongas al sol, en
esta temporada es frecuente padecer este mal, principalmente en las
ciudades con un clima cálido, el padecimiento consiste en elevaciones
de la temperatura corporal de 41.1 oC causada por incapacidad para
tolerar la temperatura ambiental de 32.2 oC y con humedad elevada.
El golpe de calor es la más grave lesión de este tipo,
puede amenazar la vida, con signos y síntomas de otros trastornos
por calor pero complicada con delirio, y colapso vascular. Se presenta
en dos formas, la producida por el calor y la clásica. La primera
es |
más
frecuente en jóvenes que realizan actividad física intensa;
el golpe de calor clásico se observa en ancianos y en personas
con trastornos preexistentes como enfermedad cardíaca y respiratoria,
diabetes o alcoholismo o que emplean diuréticos fármacos
que trastornan la capacidad de sudar.
Ocurre por permanecer demasiado tiempo de pie, en especial con los
músculos de las piernas tensos. Se debe a la acumulación
de sangre en las extremidades inferiores. Algunos signos de advertencia
son: cambios visuales, desvanecimiento y náuseas.
Para prevenirlos, se flexiona las rodillas y los músculos de
las piernas periódicamente. El tratamiento consiste en retirar
a la persona del ambiente cálido, hacerlo descansar y administrarle
líquidos vía oral.
Agotamiento
Conocido también como colapso por calor o postración
por calor, es una forma menos grave de lesión, de esta clase
ocurre a menudo en los ancianos y en los sujetos físicamente
activos. Entre los síntomas se incluyen temperaturas entre
39 y 41 grados centígrados, trastornos del estado mental,
como confusión, desvanecimiento, tendencia a discutir, desmayo,
cefalea, náusea, vómito, fatiga y calambres musculares.
Los individuos con edema calambres y agotamiento inducido por calor
pueden ser dados de alta; las personas con golpe de calor se transfieren
a la unidad de cuidados críticos para observación
de complicaciones tardías. Los criterios para el alta son:
temperatura y otros signos vitales normales, procesos mentales normales,
gasto urinario adecuado y posibilidad de enfriar el ambiente al
que regresa la persona. Esta información fue proporcionada
por la catedrática de la Facultad de Enfermería en
Poza Rica, María Cristina Herrera Castillo.
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