Año 2 • No. 71 • agosto 26 de 2002 Xalapa • Veracruz • México
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¿Sabes cuánta agua debemos beber?
Heriberto G. Contreras y Leticia Garibay
En verdad nos sorprendió lo que descubrimos después de leer esto y lo queremos compartir con ustedes, amables lectores. Son necesarios ocho vasos de agua por día para sentirse bien; bueno, eso es lo que dicen muchos médicos, dietistas y personas en general.
Tanto ha crecido esto que para algunos beber agua se ha transformado en una obsesión, pero la necesidad de tanto líquido podría ser un mito.
El temor de estar deshidratado sólo por tener sed es, en muchos casos, otro mito. La idea de que las bebidas con cafeína no cuentan porque provocan deshidratación probablemente es otro concepto tan erróneo como los dos anteriores.
El mejor criterio es “beber cuando se tiene sed”, dice el doctor Heinz Valtin, profesor emérito de la Escuela de Medicina de Dartmouth, quien desarrolló un estudio sobre la teoría de los ocho
vasos de agua, publicado en la Revista de Fisiología de Estados Unidos.
Heinz Valtin señala que buena parte de la confusión está centrada en la procedencia del agua. Los alimentos contienen mucha agua. Las frutas y verduras están constituidas de 80 a 95 por ciento por agua; la carne contiene una buena cantidad; incluso el pan y el queso son agua en 35 por ciento, señala el Doctor Valtin, y a éstos se suman los jugos, la leche y otras bebidas. Existe la idea de que sólo puede venir de una botella y es un error, comenta Paula Trumbo, del Instituto de Alimentos y Nutrición de Estados Unidos.
Muchos de nosotros bebemos aun sin necesidad, impulsados por la publicidad, los alimentos salados y los ambientes secos. A la mayoría de la gente eso no la afectará, más allá de tener que ir al baño con frecuencia, afirma Valtin. Pero para las personas con ciertos padecimientos, el exceso puede traer problemas, e incluso la muerte, advierte. Quienes consumen la droga éxtasis, que
exacerba la sed, pueden en ocasiones beber demasiado. La llamada intoxicación con agua diluye el sodio en la sangre hasta que el organismo deja de funcionar bien.
Nadie discute la importancia de beber suficiente agua. Uno de los problemas de la vejez es que disminuye la sensación de sed, lo cual puede redundar en una deshidratación excesiva. Las personas con cálculos renales deben beber mucha agua, como todas las que realizan ejercicios físicos. La conclusión general de Valtin es que, “si la gente calma su sed y produce orina de un color amarillo sano, ésa es una señal fiable”… Cómo la ven.
Con información de Chicago Tribune y la FDA.