Será hasta diciembre cuando se publiquen los resultados, una vez consultado los espacios en las universidades de Japón, debiendo presentarse Paola, de resultar elegida, en abril del próximo año. Las universidades que recibirán a los estudiantes mexicanos serán las de Waseda, Tokio y Shizouka.
Visiblemente emocionada por estar a punto de alcanzar su sueño, Paola comenta que el camino para alcanzar esta beca inició presentando exámenes básicos en la Fundación Japón.
Afirmó que de ganarse la beca no tendría problema con sus estudios actuales, pero para asegurarse de no dejar nada pendiente ha iniciado los trabajos de investigación de su tesis profesional, además de que cuenta con todo el apoyo de la uv para terminar su carrera a distancia.
La gran dificultad para aprender japonés –consideró– radica en su escritura: “La escritura está compuesta por katakana, hiragana y Kanji; la primera se utiliza para las palabras extranjeras y onomatopéyicas, en tanto que la hiragana es un abecedario para escribir las palabras propias japonesas, y el Kanji son ideogramas que simbolizan tanto significado como pronunciación y son la base del idioma japonés, son como 6 mil 500 caracteres”. Gracias a sus maestros Esteban Suárez Romero y Mitsuru Kurosaki ha incursionado en este difícil idioma con gran éxito.
Aseguró que como universitaria tiene la posibilidad de conseguir becas al extranjero, por lo que exhortó a los demás estudiantes de la uv a no dejarse llevar por las apariencias de que es difícil conseguirlas. “Sé que hay excelentes oportunidades en el país para estudiar, pero conocer otros lugares siempre inspira a seguir adelante y traer todos los conocimientos que puedas a México”.