La razón de los animales
Heriberto G. Contreras y Leticia Garibay
Si
nunca habías pensado en la cantidad de animales que se ha
sacrificado por salvar la vida de miles de seres humanos, seguramente
hay dos posibilidades: una, que nunca hayas necesitado de algún
fármaco o avance científico que previamente fue probado
una y otra vez en animales; o la segunda, que no seas de este planeta.
Te invitamos de cualquier forma a que leas estas líneas.
El pasado 6 de octubre fue el Día Mundial de los Animales,
fecha más que memorable, por lo que decidimos hablar de ellos,
ya que poco lo hacemos los egocéntricos seres humanos.
¿Recuerdas
aquellos silogismos categóricos que durante la preparatoria
nos rompían la cabeza? Una pista, “si A, entonces B”,
o algo así. Para nuestro caso, se nos viene uno a la mente,
“si hay animales, entonces vivimos”; y otro, “si
no hay animales entonces morimos”.
Aunque suene crudo es una realidad. Seguramente has visto en las
noticias que a menudo se lanzan naves al espacio. Bien, el Sputnik
ruso en 1957 fue el primer objeto terrestre que logró salir
de la atmósfera, tripulado por la perra “Laica”,
primer organismo vivo que sobrevivió en el espacio. No fue
sino hasta que Yuri Gagarin partió desde el desierto soviético
para aterrizar vivo en Siberia que el hombre empezó verdaderamente
a creer que el universo no era tan insondable, y que la Luna estaba
más cerca cada noche.
Así es, el primer organismo vivo en salir del planeta fue
un can y no un hombre; tan sólo en las misiones Sputnik viajaron
otros perros como “Belka” y “Strelka”, en
el número cinco de la serie; en el seis “Pchelka”
y “Mushka”; “Chernushka” en el nueve; “Zvezdochka”
en el 10 y “Verterok” and “Ugolyok” en el
Cosmos; todos en misiones rusas entre 1957 y 1961.
Los chimpancés también han sido protagonistas de la
carrera espacial, como “Gordo”, “Able”,
“Baker”, “Sam” y “Miss Sam”,
que tripularon entre 1958 y 1960 los misiles Júpiter y Pequeño
Mercurio. De igual forma, “Ham” y “Enos”
en 1961 partieron al espacio a bordo de los Mercurios dos y cinco.
Podríamos
citar cientos de pasajes e historias alrededor de estos seres que
cada día nos sorprenden más. De ellos escogimos uno,
“Felix”, un gato callejero que deambulaba por los rincones
de París y que el 18 de octubre de 1963 fue lanzado al espacio
a bordo de la sonda Verónica. Él fue el primer gato
en salir de la Tierra y orbitarla con éxito.
Joe Bielitzki, veterinario en jefe de la nasa por 20 años,
quien controla y supervisa a todos los animales que han mandado
al espacio, señala en la página de la agencia que
el uso de seres vivos no es por el gusto de hacerlo, sino para que
el ser humano crezca día con día y se supere como
especie, logrando conocerse a sí mismo.
Pero
la historia no sólo se remonta al espacio. En nuestros días,
hemos sido partícipes de nuevos términos, como el
de clonación. En este sentido, de inmediato surge “Dolly”,
la primera oveja clonada en la Gran Bretaña que disparó
por todo el mundo esta tendencia.
En la Universidad de Texas apareció “Andy”, el
primer mono Rhesus duplicado genéticamente, además
de que se le introdujo una proteína fluorescente proveniente
de los crustáceos, que hoy en día está ayudando
a experimentar con el cáncer y que podría suprimir
las dolorosas quimioterapias.
Gatos como “Carold Copy” o cc y su madre sustituta “Allie”
también han contribuido al estudio de la clonación,
así como lo han hecho cerdos, caballos, toros, ovejas, que
sin duda poco a poco nos irán aportando más respuestas.
Después de analizar que gracias a las rutas migratorias la
aviación sabe cómo volar y hacia dónde, los
barcos al seguir a las ballenas evitan las corrientes más
fuertes en los océanos, los físicos alemanes intentan
crear nuevas formas de distribución de las ciudades y sus
avenidas con el estudio de las hormigas, o las ratas “Wistar”
o “Long Evans” nos responden cada vez más cómo
y dónde se encuentran nuestros puntos neurálgicos
que controlan el dolor, nos preguntamos: ¿y nosotros qué
hacemos por ellos?
Algo
de Derecho animal
Hoy en día hay intentos serios por proteger a los animales.
Organismos como la onu se han declarado a favor de su protección
y cuidado, a través de documentos como la Declaración
Universal de los Derechos del Animal:
“Considerando que todo animal posee derechos; considerando
que el desconocimiento de dichos derechos ha conducido y sigue conduciendo
al hombre a cometer crímenes contra la naturaleza y contra
los animales; considerando que el reconocimiento por parte de la
especie humana de los derechos a la existencia de las otras especies
animales constituye el fundamento de la
coexistencia
de las especies en el mundo; considerando que el hombre comete genocidio
y existe la amenaza de que siga cometiéndolo; considerando
que el respeto hacia los animales por el hombre está ligado
al respeto de los hombres entre ellos mismos; considerando que la
educación debe enseñar, desde la infancia, a observar,
comprender, respetar y amar a los animales, se proclama lo siguiente: