Año 2 • No. 81 • noviembre 4 de 2002 Xalapa • Veracruz • México
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Vecinos de ríos Sedeño y Carneros, con parasitosis: QFB de la UV
Problema educativo más que
de contaminación: Azucena Mendoza
Ángeles González

La mitad de la población infantil y adulta de las colonias periféricas de Xalapa, Banderilla y Acajete que colindan con los ríos Sedeño y Carneros padecen parasitosis, señaló Azucena Mendoza Fernández, docente de la Facultad de Química Farmacéutica Biológica (QFB) de la Universidad Veracruzana, quien aclaró que las causas del problema están asociadas más a los malos hábitos de higiene y alimentación que a la contaminación de los afluentes.
Acompañada de las docentes Yolanda Medina Romero, Edith Riaño Sánchez e Isabel Lozano Pérez, así como de los pasantes en servicio social Rosa Ernestina Sánchez Moreno, Ángel Gutiérrez Luna y Enrique Badillo Zavaleta, Azucena Mendoza detalló el trabajo de vinculación social e investigación que realizan en coordinación con el proyecto de Microcuencas de la Dirección de Vinculación General de la casa de estudios.
Se trata de las colonias Lomas de Sedeño, El Naranjal, El Moral (Xalapa), Xaltepec (Banderilla) y Plan de Sedeño (Acajete), ubicadas a lo largo de la ribera del río Sedeño; así
como las colonias Veracruz, Jaramillo, Lomas de San Roque y Parque Ecológico Molinos de San Roque (Xalapa) del río Carneros. Ahí, más de 50 por ciento de la población tanto adulta como infantil tiene parásitos, entre los que destacan las amibas (entamoeba histolytica), lombrices (ascaris lumbricoides), giardia lambia y trichuris trichiura.
Estos parásitos afectan principalmente a los niños, quienes padecen malestares gastrointestinales, sueño, cansancio y, por tanto, bajo rendimiento escolar; las amibas pueden afectar seriamente el hígado y las giardias obstruyen la absorción de nutrientes, provocando anemia.
Azucena Mendoza detalló que con la participación de 35 alumnos de séptimo y octavo semestre realizaron estudios de sangre, orina y copro a niños y adultos de las citadas colonias, lo que les permitió identificar estos problemas de parasitosis.
Los casos más agudos son canalizados a las instituciones de salud, además de que la Dirección de Vinculación impulsa el proyecto de Manejo Sostenible de las Microcuencas de los ríos Sedeño y Carneros, con acciones de saneamiento, educación, prevención de enfermedades, recreación y cultura.
Respecto al aprendizaje de los estudiantes y pasantes de QFB, la docente destacó que una vez que adoptaron el Modelo Educativo Flexible integraron en cada práctica los elementos de distintas experiencias educativas: hematología, bioquímica clínica y parasitología.
“Es un ciclo en el que todos nos beneficiamos, los alumnos aprenden, el docente se fortalece como profesionista, la facultad asegura la vigencia y pertinencia de sus planes de estudio y sobre todo las comunidades reciben una atención especializada.
“En el contacto con las comunidades los alumnos se enteran de quién es la gente con la que trabajan, porque en el laboratorio se pierde el contacto con las personas, que se convierten en tubos de sangre, frascos de orina o muestras de excremento, olvidándose de que son personas que necesitan estar sanas y felices”, destacó Azucena Mendoza, y dijo también que el trabajo comunitario sensibiliza, compromete y responsabiliza a los estudiantes, ya que les permite tomar decisiones y asumir que trabajan con problemas y personas reales.
“Además de reforzar sus conocimientos y desarrollar habilidades, aptitudes y destrezas, aprenden a moderar su carácter impulsivo, introvertido, extrovertido. Frente a la comunidad deben conservar la ecuanimidad, el equilibrio y el trato con los demás, sobre todo el trabajo en equipo, la disciplina, cooperación, el reconocimiento de los liderazgos y el obedecer instrucciones de sus propios compañeros estudiantes”.
Por su parte, Isabel Lozano Pérez, coordinadora del Departamento de Vinculación de qfb, destacó la trascendencia de que la uv cuente con una Dirección de Vinculación y que mediante el registro ante el Sistema de Información para la Vinculación Universitaria (sivu) cada entidad académica pueda institucionalizar su trabajo de vinculación.
“Esto nos da un sustento académico y facilita el enlace con el sector productivo, en donde nuestros estudiantes realizan sus prácticas. Muchos de ellos son contratados previo examen y se enlazan con otras instituciones para iniciar estudios de posgrado; todo lo anterior nos permite incrementar el número de titulados y de prestadores de servicio social”, destacó Lozano Pérez.
Al respecto, Yolanda Medina Romero agregó que el trabajo de vinculación les ha permitido abrirse a la colaboración con otras facultades: “La vinculación es una condición que nos piden los ciees para acreditarnos, y si la uv la considera como eje de las funciones sustantivas, de la misma manera debiera ser reconocida en los programas de productividad docente, porque ahí sólo le dan 200 puntos, que el docente puede cubrir con estudios de posgrado, por lo que muchos profesores ya no se interesan por el trabajo de vinculación; a nosotras ya no nos cuenta en productividad. De hecho, hacemos vinculación porque nos gusta pero no tenemos ningún pago extra por ello; así que la uv debe reconocer el lugar preponderante que la vinculación ya tiene en el proceso de enseñanza-aprendizaje”.