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Una
jornada musical cuajada en sorpresas es lo que anuncia la Orquesta
Sinfónica de Xalapa para el concierto de esta semana. Por
principio, la audición se dará en la iglesia de Guadalupe,
de Coatepec, como una consideración elemental hacia aquella
tan cercana como escasamente visitada ciudad de la zona Centro veracruzana.
Por añadidura se presentan dos estrenos en Veracruz, la obra
Ángeles de llama y hielo de la joven compositora mexicana
Ana Lara y el Concierto para clarinete de Bernhard Crussel. Por
si fuera
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poco,
el director belga Ronald Zollman debuta al frente de la osx luego
de permanecer por una docena de años como titular de la Filarmónica
de la UNAM.
Juan Manuel Solís, el clarinetista que habrá de actuar
como solista, es originario de la ciudad de Oaxaca, en la Ciudad
de México continúa su preparación en el Conservatorio
Nacional de Música bajo la tutela del destacado clarinetista
Marino Calva. De 1990 a 1999 ocupó el puesto de clarinete
coprincipal en la Orquesta Sinfónica Carlos Chávez,
con la que actuó en diversas ocasiones como solista. Es invitado
permanente del Cuarteto de Cuerdas de la Ciudad de México
para la interpretación de obras de repertorio tradicional
y de compositores nuevos. Fue integrante del Cuarteto Chalumeau.
Se ha presentado como recitalista en los festivales universitarios
de clarinete organizados por la unam, así como en el Primer
Congreso de Clarinete, efectuado en agosto del 2002 en la ciudad
de Oaxaca.
Juan Manuel Solís realizó, el 11 de agosto de 2001,
el estreno mundial de Al cadere d’una bella giornata D’Aprile,
para clarinete, violín y orquesta de cuerdas de Massimo Romanelli,
en el Festival Vivaldi. Actualmente es integrante de la sección
sección de clarinetes de la Orquesta Sinfónica de
Xalapa.
En lo que respecta al Concierto de Bernhard Henrik Crusell, es necesario
comentar que se trata de una obra y un compositor desconocidos en
nuestro medio. Crussel, en su época, fue considerado uno
de los mejore ejecutantes de clarinete y su celebridad como compositor
trascendió más allá de las fronteras de su
país. Autodidacta de formación, sus formidables dotes
artísticas le permitieron avanzar sorprendentemente en los
conocimientos básicos.
Ana Lara, por su parte, nació en la Ciudad de México
en el año 1959. Se trata de una joven y avanzada compositora
que realizó estudios profesionales en Polonia, durante los
años en que este país contaba con la más avanzada
escuela musical de Europa. Ha sido miembro de las mesas directivas
de muchas sociedades musicales y es compositora residente de la
Orquesta Sinfónica Nacional de México.
Con respecto a la obra que se estrena en Veracruz, que lleva dedicatoria
para el director de orquesta Enrique Diemecke, la compositora ha
mencionado lo siguiente:
Decidí utilizar la menor cantidad de recursos, cinco notas
nada más. Todo es bastante elemental, pero yo quería
trabajar la forma y crear cuatro mundos distintos, los de cuatro
ángeles; del alba, de la luz, de las tinieblas y del ocaso.
Está inspirada en unos poemas de Francisco Serrano. Esta
obra me da el pase al mundo angelical. Leí muchísimo
sobre los ángeles, quería entenderlos bien e invocarlos
con mi música. Y siento que en esos ángeles hay mucha
magia... Por ahí va mi búsqueda.
Por otra parte, resulta conveniente citar una premisa manifestada
por la misma compositora con relación a su trabajo artístico:
Me gusta pensar en el sonido no como una línea sino como
un objeto que poseeun volumen: una esfera. Una esfera que posee
un centro y ese centro es el corazóndel sonido. Para mí
la experiencia sonora es, por tanto, no una experiencia que me rodea
sino una en la que entro y en donde nos transformamos mutuamente.
El programa se complementa con la conocida Séptima sinfonía
del checo Antonin Dvorak. Te sugerimos no perderte de este acontecimiento.
La entrada será sin costo para todo público. |