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Una
atractiva programación ofrece para este viernes 21 la Orquesta
Sinfónica de Xalapa. Inicialmente, podemos comentar que un
atractivo importante será la presencia de la pianista norteamericana
Anne-Marie McDermott, artista a quien respalda un sólido
prestigio como ejecutante de música de cámara y solista
de las más importantes orquestas sinfónicas de Estados
Unidos y Japón.
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Ella
habrá de participar con el célebre Concierto número
21 para piano y orquesta de Mozart.
Por añadidura, el programa presentará los Tres
Nocturnos de Claude Debussy, obras atractivas en su estructura
y consistencia armónica, representativas del estilo “impresionista”
que definió a su autor, aunque a Debussy mismo nunca simpatizó
del todo este encajonamiento que le hizo sentirse como una extensión
musical del arte pictórico impresionista francés.
Los Nocturnos se deniminan Nubes, Fiestas y Sirenas
Sirenas y en éste último participará el
Coro de la Universidad Veracruzana que dirige Daniel Hazán.
Además, se interpretarán Canzonas de Giovanni
Gabrieli, compositor veneciano del barroco temprano a quien se considera
como el precursor de las modernas técnicas de orquestación.
Desde luego que ya no existen muchos de los instrumentos que se
usaban en la época de este autor, pero se han realizado arreglos
para ser interpretadas sus obras por conjuntos instrumentales modernos,
que nos manifiestan la genialidad de este compositor.
Finalmente, se hará escuchar la formidable Sinfonietta de
Leos Janacek, compositor checo. Partitura de engañosa denominación,
podría darnos la idea de una pequeña sinfonía,
cuando en realidad se trata de una obra de extraordinario vigor
y dureza, dificilísima para todo director y orquesta.
La dirección será de Carlos Miguel Prieto, a quien
se define como uno de los directores mexicanos de más notoria
actividad internacional.
El concierto de referencia se dará en un foro que será
anunciado con toda oportunidad. Te sugerimos que te mantengas al
tanto de la cartelera universitaria, porque un acontecimiento como
este no puedes perdértelo. |