El grupo focal es una técnica utilizada en la investigación social. Consiste en reunir a un pequeño número de personas para la discusión de un tema, guiadas por el investigador. Los participantes hablan libre y espontáneamente sobre temas que se consideran de importancia para la investigación. Generalmente los participantes se escogen al azar y se entrevistan previamente para determinar si califican o no dentro del grupo.
La reunión del grupo focal es dirigida por un moderador (generalmente el investigador mismo) que utiliza una guía de discusión para mantener el enfoque de la reunión y el control del grupo. La guía de discusión contiene los objetivos del estudio e incluye preguntas de discusión abierta. Para determinar cuántos grupos se necesitan, primero es necesario recopilar la información pertinente, analizar la información para identificar categorías y temas sobresalientes y continuar la organización de grupos hasta que la información obtenida esté completa o, en términos investigativos, se sature; esto es, cuando las discusiones ya no aporten datos o información nueva.
Normalmente en un grupo focal participan entre 8 y 10 personas; sin embargo, el investigador puede decidir usar un grupo más pequeño en etapas subsecuentes para profundizar en los temas previamente identificados como relevantes.
Como en las entrevistas, se recomienda que las sesiones sean grabadas, de preferencia videograbadas, para que así el investigador se concentre en guiar la discusión. Como regla general, el grupo focal no debe durar más de dos horas. Se recomienda que los participantes se sienten de tal forma que se promueva su participación e interacción. Para llevar a cabo un grupo focal, es necesario que el investigador diseñe una guía de discusión. Ésta es muy similar a la guía de entrevista, ya que el investigador plasma en ella las preguntas que guiarán la discusión del grupo de participantes.