Tuxpan, Ver.- Entre la zona de Casitas y Tamiahua se han
identificado zonas prioritarias de conservación para poblaciones
de delfines de la especie nariz de botella. Estos delfines se cuentan
como una de las 28 especies de mamíferos marinos del Golfo
de México que se encuentran actualmente en alguna categoría
de riesgo.
La identificación de estas zonas forma parte del trabajo
de investigación realizado por alumnos y académicos
del laboratorio de mamíferos marinos de la facultad de Biología
de la Universidad Veracruzana en la región Tuxpan.
El conocimiento sobre mamíferos marinos en la porción
mexicana del Golfo de México es escaso, lo que ocasiona que
en eventos aislados de avistamientos como los acontecidos el año
pasado (la ballena jorobaza y las orcas avistadas cerca del puerto
de Veracruz) en las costas veracruzanas, genere malos entendidos
e ideas equivocadas entre la población.
Al respecto, Arturo Serrano Solís, jefe del Laboratorio de
Mamíferos Marinos de la Facultad de Ciencias Biológicas
y Agropecuarias de la Universidad Veracruzana (UV), en la región
Poza Rica-Tuxpan, lleva a cabo esta investigación con el
apoyo de académicos y alumnos y estudiantes de postgrado.
En este sentido, Serrano señala que esta investigación
tiene la finalidad de generar recomendaciones para el manejo y conservación
basadas en un conocimiento sólido de la ecología de
mamíferos marinos. En el laboratorio fundado en el año
2004 en esta facultad se han tenido ya los primeros resultados en
los que se confirma la existencia de al menos tres poblaciones residentes
de delfines nariz de botella.
Lo anterior ha cobrado mayor relevancia debido a los factores que
determinan el ámbito hogareño de estos organismos,
ya que se ha encontrado que prefieren zonas cercanas a desembocaduras
de ríos, con fondo arenoso y una profundidad promedio de
26.5 metros.
Aún cuando estos animales se pueden desplazar largas distancias
y son altamente sociales, no se ha encontrado que haya mezclas entre
individuos de las tres poblaciones, lo que indica que son poblaciones
aisladas. Esto será confirmado por los estudios conductuales
y genéticos que realizan dos de los estudiantes integrados
en esta investigación.
Serrano recalcó que aunque aún falta mucho por hacer,
por ahora ya se cuenta con un catálogo de especimenes fotografiados
en esta región, donde a través de la técnica
de foto-identificación, la cual toma en cuenta las cicatrices,
manchas, muescas y heridas en las aletas dorsales de los animales
para individualizar a cada delfín, se conocen aspectos importantes
sobre la ecología poblacional de la especie.
Este catálogo fue comparado con uno realizado entre 1992-1993,
y se encontraron dos individuos en común, lo que significa
que los grupos fotografiados tienen una fidelidad al sitio de trece
años.
Explicó que con el trabajo de campo se pretende contribuir
al conocimiento general de los mamíferos marinos en Veracruz
y en el Golfo de México. “Para los trabajos de biodiversidad,
distribución y abundancia se realizan muestreos a bordo de
lanchas de 27 pies de eslora con motor fuera de borda, y dos veces
por año se realizan censos aéreos cubriendo el área
norte del estado de Veracruz”.
Agregó que a la fecha, se han registrado varias especies
de delfines las cuales están dentro de alguna categoría
de protección de la SEMARNAT: “Éste, y otros
datos generados por el Laboratorio de Mamíferos Marinos,
son importantes para identificar lugares prioritarios para su conservación,
ya que estos individuos se han identificado a nivel mundial como
indicadores biológicos de la salud del ecosistema”
|