“Si se detecta en algún alumno cualquier problema de salud general, la UV les da el derecho de solicitar atención; en Odontología se les invita a que se atiendan con los pasantes o alumnos en Servicio Social de la escuela”, explicó Machín Borges, quien considera que hace falta crear un consultorio externo para los alumnos de otras Facultades que se les dificulte el desplazo a la Unidad de Ciencias de la Salud.

“A los estudiantes de Odontología se les da un seguimiento en el transcurso de su carrera, y cuando vuelvo a verlos en alguno de los semestres posteriores les presento nuevamente ese primer cuestionario para verificar qué tanto del diagnóstico se ha mejorado”, explicó la académica Magda Elena.
Sorpresivamente se ha encontrado que, aún cuando son estudiantes del área de la Salud, se preocupan menos por ésta que por la parte estética: “Cuando se volvieron a revisar, la mayoría tenía tratamiento de ortodoncia, pero si habían tenido un diagnóstico de algún diente careado vimos que no se habían puesto atención. Esto demuestra que lo estético siempre es importante”.

Machín Borges manifestó que su interés por llevar a cabo esta tarea la ha llevado a asistir continuamente a congresos y cursos de epidemiolgía bucal al Instituto Nacional de Salud Pública y otras instituciones que abordan esta problemática.
“Trato de que los alumnos se integren a los trabajos de investigación. Esto me ha permitido promover a algunos jóvenes que se han interesado en el Verano de la Investigación Científica que desarrolla el CONACYT, lo cual me llena de satisfacción, sobre todo porque sin contar con los elementos óptimos hemos podido realizar la tarea”, expresó.

Magda Estela Machín y un grupo de jóvenes presentarán los resultados del cuestionario aplicado el ciclo pasado en la próxima Reunión del PUISAL (Red de Programas Universitarios de Investigación en Salud de América Latina), que se realizará en la Universidad Autónoma de Baja California, donde diversas instituciones van a presentar trabajos en forma verbal y en cartel de las áreas de Medicina, Enfermería y Odontología.

Por su parte, la académica dará a conocer el estudio Prevalencia de caries, por medio del cual se pudieron determinar los antecedentes familiares de la presencia de caries en dientes que ya fueron obturados y aquellos que aún estén sin obturar: “A partir de nuestro cuestionario se aprecia qué dientes se han perdido, en qué condiciones están los que permanecen, sobre todo los terceros molares, dada la edad de los alumnos de nuevo ingreso”.

Magda Estela comentó que ya no se pierde tanto el primer molar, como antiguamente sucedía, que era esa pieza la que se perdía a temprana edad y eso traía muchos problemas en el acomodo de los demás dientes que iban saliendo. Actualmente se pierden sólo por tratamientos de ortodoncia, para que haya más espacio y que de esa manera las personas puedan tener una buena oclusión.

Al respecto explicó que, a diferencia de lo que pasaba con otras generaciones, “ahora los papás nos preocupamos porque nuestros hijos conserven sus piezas. Antes se pensaba que si algún diente estaba dañado era mejor que lo sacaran, pero ahora pensamos más en su futuro, para que más adelante eso no sea un problema”.