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Crítica
a los reality shows y humor ácido
en el Foro Torre Lapham
Felicidad instantánea
y efímera en Atracciones S.A.
Gina Sotelo |
No
es exfoliante, ni nutritiva, ni hidratante, ni mucho menos enriquecida
con vitaminas y minerales. La televisión es, antes que todo,
entretenimiento. El teórico italiano Giovanni Sartori ha
dicho una y otra vez que a la televisión se le juzga de forma
cruel al esperar que sea educativa y que fomente los valores cuando
ésa no es su función, pues está en la familia
y la escuela la responsabilidad de enseñar.
Sin embargo, la televisión irrumpe en millones de hogares
diariamente arrasando y acaparando vorazmente toda atención.
Hay niños que incluso antes de aprender sus primeras letras
han pasado ya cientos de horas frente al televisor-niñera,
la que además de ser su primera compañía, es
su introducción a la escuela.
Carlos Converso y sus estudiantes del Taller de teatro alternativo
en la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana (UV) están
conscientes de este fenómeno de masas, y sin pretender hacer
ningún planteamiento dramático, construyeron a través
de una dramaturgia colectiva la divertidísima obra Atracciones
S.A.
Luego de una temporada interfacultades, en la que visitaron Psicología,
Humanidades, Arquitectura, Medicina, Artes y Economía, por
sólo citar unas cuantas, se presentarán ahora en la
Facultad de Teatro. Con dirección del propio Converso, vuelven
a escena los domingos 15, 22 y 29 de octubre, a las 12 y 18 horas
en el Foro Torre Lapham.
Baste sintonizar al azar cualquier canal de televisión para
percibir diversos programas en los que se evidencia una sociedad
de consumo que por quince minutos de fama es capaz de dejar de lado
su esencia humana.
En los Reality Shows todo es instantáneo y efímero.
Las emociones son prefabricadas, las actuaciones acartonadas; la
magia que producen los reflectores, el aplauso del público,
el vestuario, maquillaje y los patrocinadores crea espejismos muy
parecidos a la felicidad.
En Atracciones S.A., Carlos Converso y su grupo de actores reflejan
de una manera hilarante, absurda, crítica y muy divertida
la realidad detrás de estos programas considerados verdaderos
fenómenos mercadológicos que no se tientan el corazón
a la hora de elevar sus ratings. Es por medio de emisiones carentes
de contenido y con gran atractivo visual como seducen a la masa.
“Nuestra propuesta –dice Converso– era hacer una
crítica con humor e ironía que nos permitiera divertirnos.
Soy de la creencia de que el actor, en la medida que transmite energía
de goce, producirá en el público una enorme fuerza
por contagio”.
Sobre el éxito que ha tenido la obra entre el público
universitario, el titiritero comenta que son los jóvenes
“el público por excelencia, el mejor y más receptivo.
Y es porque reconocen de inmediato las situaciones planteadas, el
código en el que se expresan las ideas”.
Partiendo de que si el alumno no va al teatro, el teatro tendrá
que ir al alumno, Converso y su staff recorren espacios alternativos
en busca de nuevos públicos:
“Hay Facultades que nos piden que los visitemos y otras más
que quieren que regresemos con esta obra, que no pretende tener
un planteamiento profundo de dramaturgia, sino manejar el humor
para que el público se divierta. Si se produce alguna reflexión,
nos damos por satisfechos”.
Atracciones S.A estará en cartelera los domingos de octubre
en el Foro Torre Lapham de la Unidad de Artes, ubicado en Belisario
Domínguez 25. El boleto tiene un costo de 30 pesos y 15 para
estudiantes con credencial.
Carlos Converso, titiritero de tiempo completo
Radicado desde hace 20 años en Xalapa, Carlos Converso es
actor, dramaturgo y director de teatro especializado en títeres
y máscaras. Tiene más de treinta años de experiencia
artística. Su carrera inició a principios de la década
de los años ochenta con el espectáculo Pandemonium
de Carlos Converso, obra que ganó el Premio Rosete Aranda
a la mejor obra de títeres de 1984.
A este montaje le siguieron Titirijugando, Un halo de esplendor,
Al son del corazón y Barbacoa, historia de piratas, esta
última seleccionada para representar a nuestro país
en el Festival Internacional de Tolosa y Alicante, España,
en 1997.
Como director ha presentado las obras teatrales Ubú rey,
Comino va a la selva, Maniobras 7 y Se Vende. En su faceta de docente
ha desarrollado múltiples talleres a lo largo de la república
acerca del lenguaje de los títeres y sus técnicas.
Entre sus libros publicados se cuentan Barbacoa, historia de piratas;
El entrenamiento del titiritero y La pesquisa.
Actualmente es docente de la Facultad de Teatro de la UV y dirige
el Centro de Estudios en el Arte de los Títeres (www.escueladetiteres.com),
ubicado en la calle 13 de septiembre número 37, en la capital
del estado. |
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