Año 6 • No. 244 • Octubre 30 de 2006 Xalapa • Veracruz • México
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  Aseguró funcionario de la Comisión Federal de Telecomunicaciones
Hallar fondos sin comercializarse, reto
de radiodifusoras con vocación social

Dunia Salas Rivera
Esto garantiza que sus contenidos van a seguir marcando la diferencia con la radio comercial: Eduardo Ruiz Vega

Eduardo Ruiz Vega, funcionario de la COFETEL, resaltó el prestigio que Radio UV tiene en el país.
Es urgente generar una política de Estado que involucre a todos los actores de los niveles de gobierno de los poderes Ejecutivo y Legislativo para dotar de recursos a las radios con vocación social que les permitan tener economías de escala sin perder su propio valor e identidad, aseguró Eduardo Ruiz Vega, funcionario de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (COFETEL).
Durante su conferencia “La Radio de Vocación Social y la Ley Federal de Radio y Televisión”, realizada en la USBI de la Universidad Veracruzana (UV) en Xalapa, Ruiz Vega dijo que la situación de las radios universitarias, como la del resto de las permisionarias es que, ante la imposibilidad de comercializar, tienen el reto de enfrentar el proceso de modernización tecnológica que se da con la digitalización:
“Es bueno que la radio de vocación social no se comercialice, porque esto garantiza que sus contenidos van a seguir marcando la diferencia con la radio comercial”, explicó Ruiz Vega, quien añadió que no se debe poner a competir a la radio pública por los anunciantes, porque corremos el grave peligro de que se pierda la riqueza, objetividad y pluralidad de sus contenidos.

“El verdadero valor de la radio universitaria radica en la pluralidad, lo cual no está peleado con que haya fondos, con que se puedan adquirir los equipos de manera agregada por estos recursos, negociando con los fabricantes mejores precios. Estas son economías de escala que deben tener las telecomunicaciones”, aseveró el funcionario federal.

Sin embargo, agregó que mientras no tengamos una política real de medios de vocación social, de medios públicos, con el modelo y las características del mercado mexicano, esto no será posible, por lo que conminó a la sociedad en general y a las radios universitarias en particular a pensar, con las características que hay en México, cómo podemos organizar a nuestros medios de vocación social para apoyarlos y que no enfrenten solos este proceso difícil, inclusive para los medios comerciales.

“La sociedad debe trabajar en esto. Las autoridades tenemos que cambiar la visión y ser más receptivas y abiertas. Tenemos que hacer uso de las comunicaciones, como Internet, correo electrónico, y otras; debemos de sensibilizar, en principio, al Congreso de la Unión”, expresó Eduardo Ruiz Vega, quien precisó que estamos en una oportunidad extraordinaria ya que “la legislatura está empezando, estamos en el momento idóneo para empezar a trabajar y hacer algo que cubra los espacios que no se cubrieron con la reforma a la Ley de Telecomunicaciones”.

Radio UV, con merecido prestigio en el país
En México, destacó Eduardo Ruiz, la radio impulsada por las instituciones de educación superior ha tenido una participación importante en el desarrollo de nuestro país desde 1937, fecha en la que inician las transmisiones de Radio UNAM.

“De acuerdo con información generada por el Sistema Nacional de Productoras y Radiodifusoras de las Instituciones de Educación Superior (SINPRIES), existen 35 estaciones radiodifusoras en diversas instituciones de educación superior, algunas de las cuales han hecho importantes esfuerzos para forjarse un merecido prestigio, como la Radio Universidad Veracruzana, que fue creada hace poco mas de 60 años”, enfatizó.

En este sentido, manifestó que es innegable el esfuerzo que han hecho las instituciones de educación superior para destinar recursos financieros para la instalación y equipamiento de sus radiodifusoras y productoras: “Un reto importante es diseñar, a través del concursos de los poderes Legislativo y Ejecutivo, a nivel federal y estatal, mecanismos que permitan la creación de instrumentos para dotar de fondos destinados al equipamiento y operación de las estaciones radiodifusoras permisionadas”.

Como epílogo, Ruiz Vega hizo una invitación general para analizar las experiencias de otros países que han diseñado este tipo de mecanismos, y privilegiar de esta forma el modelo mexicano de comunicación radiodifundida.