El
Día de Muertos o Todo Santos en náhuatl se nombra Xantolo
y es una tradición de hace mucho tiempo, en la cual las culturas
de la región huasteca celebramos con mucha alegría porque
existe la creencia de que por varios días, especialmente los
dos primeros del mes de noviembre, nos visitan nuestros seres queridos
ya fallecidos. Festividades
anteriores al Todo Santos (Xantolo)
El 29 de septiembre, día de San Miguel, los nahuas celebran
ese día como un aviso de que están por llegar las
almas.
El día de San Lucas, 18 de octubre, se hace la segunda ofrenda.
En este día los nahuas le dedican esta ofrenda a las personas
muertas por accidente o por armas blancas y de fuego. Las ofrendas
del día de San Lucas consisten en colocar en una mesa fotografías
de los fieles difuntos, al igual que algunas imágenes religiosas;
también se ponen 2 veladoras, café, chocolate, dulce
de jamoncillo, tamales, pan, refresco, cerveza, aguardiente, etcétera.
El mismo 18 de octubre, los nahuas ponen una cruz afuera de su casa,
la adornan con una flor blanca llamada menta (en náhuatl
se nombra istakxochitl). A los lados ponen dos floreros con la flor
de muerto (sempoalxochitl) y un sumerio (copalero o incensario)
con pedazos de copal, una resina que al quemarse despide un aroma
característico de la época.
Antes de la ofrenda se toman las dos ceras, se encienden y al mismo
tiempo se van desprendiendo los pétalos de la flor de sempoalxochil.
Así se hace un camino desde la puerta principal de la casa
hasta donde se encuentra la ofrenda.
Este día de San Lucas, las personas que hacen la ofrenda
sirven sus alimentos en la mesa de la misma para convivir con sus
seres queridos que los visitan desde el más allá.
Preparativos
e instalación de altar y arco
Los elementos necesarios para preparar el día de muertos
consisten en: maíz nuevo (cosechado recientemente), otates
(varas para armar los arcos), palmilla, la flor de muerto para decorar
o adornar el arco, el jonote o coapetlactl, al igual que el palo
de anona pepecocka para amarrar varias varas de otate y ahí
colgar las flores, las frutas y el pan con forma de muñeco;
también se consigue la flor mano de león, la leña
(para cocer diversos alimentos), las papatlas, el totomochtle u
hoja de maíz (para envolver los tamales) y la carne de pollo
y puerco para preparar los tamales.
Asimismo se compran las ceras, sumerio, copal, el cacao, el azúcar,
la canela, galletas o pan tostado (para preparar el chocolate hecho
por la misma gente), el pan (se hace o se encarga), los muñecos
de pan (para colgarlos en la ofrenda del primer día), y los
cajones de madera que servirán para poner las cosas en el
altar y las frutas.
El orden en que las personas preparan lo necesario para la ofrenda
es el siguiente:
Lo primero a hacer el 29 de octubre, es poner el nixcon (nixtamal)
y se preparan las coronas, que son hechas con la hoja de coyol (un
tipo de palmera) y la flor de olote (oloxochitl).
El 30 de octubre, en la mañana y hasta el medio día,
se realiza la plaza de flores donde la gente acostumbra a salir
a comprar los productos ya mencionados para la elaboración
de su altar. Por la tarde y noche, la gente acomoda y adorna el
altar con papel de china picado y con los diferentes tipos de flores;
en el altar se colocan las cajas que se forran para que representen
tumbas. El número de "tumbas" depende de lo que
acostumbre cada familia.
En la elaboración del arco se coloca la palmilla, flor de
muerto (llamada en náhuatl sempoalxochitl), la flor de olote
(oloxochitl), la flor mano de león (kuamijmitsxochitl), y
se le cuelgan diferentes tipos de frutas (naranjas, limas, plátanos,
manzanas, mandarinas, etcétera.), así como los panes
en forma de muñecos.
Cuando se termina de adornar el altar, en un tallo de plátano
se colocan dos ceras, y se ponen otras 2 en los cajones que lleva
de apoyo el altar.
La
ofrenda para las almas de los chicos (de los niños)
El 31 de octubre es el día de las almas chicas. Desde las
7 de la mañana se ofrenda con un caldo blanco de pollo (o
sea que no tiene picante alguno), atole, chocolate con leche, dulce
de jamoncillo, pazcal (platillo salado, elaborado con ajonjolí
o pipian, tomate verde), pan de un tamaño pequeño,
un vaso con agua, distintas golosinas y refrescos. Hay dulce de
yuca, calabaza y jamoncillo. En la ofrenda se ponen platos y vasos
chicos.
A la ofrenda de las almas chicas también se le llama de "vigilia";
es así porque vigilan a los niños que les ofrendan.
Esta ofrenda tarda hasta las 12 del medio día del 1 de noviembre.
La
ofrenda para las almas de los grandes (de los adultos)
El 1 de noviembre, a partir de las 12 del medio día, se le
ofrenda a las almas grandes (adultos) y hasta el día 2 se
quita la ofrenda. A continuación se describe la ofrenda:
Pan de queso, café, tamales de puerco con chile y de picadillo,
un vaso con agua, cerveza, aguardiente, cigarros, refrescos, tabaco,
mole, dulce de jamoncillo, piques (de frijol y/o dulce), hilacas
y chocolate. En la ofrenda se ponen platos y vasos de tamaño
normal, hechos de barro.
Las
bendiciones
El día 3 la gente lleva comida al cementerio para su propio
consumo. Al igual que las ofrendas, el alimento consiste en mole,
tamales, chocolate, dulce de jamoncillo, café, atole y galletas,
al igual que cigarros, cervezas, coronas, veladoras, cuetes y flores.
Muchas veces también llevan tríos o banda para despedir
la costumbre del día de muertos (Xantolo).
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