Raquiel
López Martínez, catedrático de la Facultad de
Matemáticas de la UV.
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Para
elevar el nivel de aprovechamiento de las matemáticas a nivel
preuniversitario, primero que nada se debe capacitar a los profesores
y, aunado a ello, mejorar las condiciones socioeconómicas de
los alumnos. Así lo considera Raquiel López Martínez,
catedrático de la Facultad de Matemáticas de la Universidad
Veracruzana (UV) y delegado en Veracruz del Comité Estatal
de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas (OMM). |
López
Martínez, junto con un equipo de entrenadores, fueron los
responsables del buen desempeño de la delegación de
jóvenes que representó a Veracruz en esta importante
competencia efectuada del 13 al 17 de noviembre en la ciudad de
Zacatecas. En esta vigésima OMM, de los 32 estados que integran
la República, el nuestro quedó en octava posición.
Fueron seis los jóvenes bachilleres que concursaron, cuatro
obtuvieron medalla: Ariel Chávez González, de Minatitlán,
se llevó el oro; Jacob Culebro Reyes, también de Minatitlán,
obtuvo la plata; y Arturo Josué Medellín, de Poza
Rica, y José Mauricio Muñiz Mortera, de Xalapa, obtuvieron
medallas de bronce.
Desafortunadamente, para el delegado de la OMM estos jóvenes
no son una estadística representativa de sistema educativo
veracruzano, sino que sus logros se deben a sus cualidades, interés
personal y al entrenamiento que durante los pasados cuatro meses
recibieron. El paso siguiente es prepararse para la XLVIII Olimpiada
Matemática Internacional que se llevará a cabo del
19 de julio al 1º de agosto del año próximo en
Hanoi, Vietnam.
Por tradición, existe entre los estudiantes prejuicios que
ubican a las matemáticas en la estratosfera del conocimiento;
parece una disciplina sólo para "cerebritos" que
muy pocos comprenden y a otros menos interesa. Al respecto, López
Martínez comenta que dos factores deberán ser básicos
para aspirar a mejores resultados en el conocimiento de esta materia:
"La tarea es complicada porque lo que nuestras autoridades
realizan sólo son modificaciones o actualizaciones de los
planes de estudio, pero a la planta docente no se les da las condiciones
necesarias y suficientes para mejorar sus competencias académicas",
aseguró.
El alumno y su condición socioeconómica es vital en
el proceso enseñanza-aprendizaje, por lo que explica: "Si
ellos tuvieran las condiciones mínimas de estudio y de espacio,
que no tuvieran que preocuparse por trabajar o conseguir con qué
alimentarse, podríamos esperar de manera natural que los
resultados fueran mejores".
Añade que este problema en la enseñanza de la matemática
es añejo y es justamente ahora cuando padecemos las consecuencias:
"La mayoría de los profesores no tienen bases matemáticas,
pues son ingenieros o contadores, entonces no manejan los conceptos
básicos elementales".
Sobre los egresados de la Facultad que podrían impartir clases
especializadas, agrega que "en términos reales esto
es complicado porque nuestros egresados aún son muy pocos
y no alcanzarían a cubrir todas las necesidades de nuestro
estado".
¿Qué
son las Olimpiadas de Matemáticas?
Es el concurso anual de matemáticas para estudiantes preuniversitarios
más importante en nuestro país, y que se realiza también
en el ámbito mundial. Su objetivo es promover el estudio
de las matemáticas en forma creativa, alejándose del
estudio tradicional que promueve la memorización y mecanización,
por lo que busca desarrollar el razonamiento y la imaginación
de los jóvenes.
Para fortalecer el programa de la Olimpiada, el Comité Organizador
de la OMM lleva a cabo también otras actividades, como un
examen de práctica llamado Canguro Matemático, cursos
especiales para profesores, y publicación de material académico
y de difusión.
El esfuerzo de un gran número de personas que han trabajado
para las Olimpiadas a lo largo de varios años se ha visto
recompensado por el papel destacado que ha tenido nuestro país
internacionalmente.
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