| Año 6 • No. 257 • Febrero 26 de 2007 | Xalapa • Veracruz • México |
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Al
hablar de su jubilación, luego de 30 años |
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| Seguiré respirando el aire de la Universidad Veracruzana, que es mi hogar intelectual: Prada Oropeza | ||
 Renato Prada Oropeza calificó a la UV como una de las mejores en Latinoamérica por la extensión de la cultura. |
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| “Hoy
comienza una nueva etapa en mi vida porque voy a jubilarme, pero eso
no significa que voy a cesar mi trabajo intelectual. Cesar sería
morir y no creo que pueda hacerlo”, expresó Renato Prada
Oropeza, al ser homenajeado por la comunidad del Instituto de Investigaciones
Lingüístico-Literarias (IIL-L) y de la Universidad Veracruzana
(UV) representada por el rector, Raúl Arias Lovillo. Luego de la sorpresa que le causó el homenaje, Renato Prada dijo sentirse contento porque asistieron algunos de sus ex-alumnos que después consideró como amigos. “La amistad con un alumno es lo que siempre anhela el profesor; que lo recuerden como un amigo y no como un obstáculo en su vida, que las materias que impartió sirvan a las nuevas generaciones como elementos para continuar su investigación y trabajo, y no como instantes amargos que tenían que superar. Siempre me he caracterizado por ser amigo de los alumnos y presentarles mi abrazo fraterno a sus inquietudes”, comentó. Refirió que en Bolivia formó a estudiantes que ahora gozan de reconocimiento internacional. Desde su país natal comenzó a trabajar para que sus alumnos tuvieran la oportunidad de ir más allá de lo que él había llegado. “Esa es una de las gratificaciones que sólo los docentes podemos tener; también cuando vemos que nuestros alumnos ya entran en diálogo con nosotros o que están llevando el diálogo a otras latitudes. Uno se siente de alguna manera proyectado porque son nuestros hijos espirituales y hay momentos que uno tiene que dejar que los hijos hagan su lucha”, asintió. El doctor en Filosofía y en Lingüística aseguró que la revista Semiosis, que él fundó, tiene un futuro muy bien diseñado con la ayuda de la investigadora Norma Angélica Cuevas y todo su equipo. Dijo que la revista volverá a proyectarse como hace 20 años cuando se consideraba de impacto y presencia universal porque se lograron intercambios con Japón, París, Cuba, Bolivia, Argentina y muchos otros países. Destacó la situación del IIL-L, de donde es investigador de tiempo completo, pues está en un momento de gran alternativa con la próxima creación del doctorado en Literatura Mexicana. Éste también ayudará a impulsar el ya de por sí destacado papel de la UV, a la que calificó como una de las mejores universidades en Latinoamérica. En esto ha incidido que ninguna ofrece una extensión cultural de real trascendencia, incluso grandes instituciones como la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica, donde cursó uno de sus doctorados. Ante el rector de la UV, el director del Colegio de Veracruz Ignacio González Rebolledo, la investigadora Norma Cuevas y el director del IIL-L Efrén Ortiz, Renato Prada concluyó su discurso con la siguiente frase: “He de seguir respirando el aire de éste mi hogar intelectual, pues toda mi obra teórica la he empezado a publicar en el seno de la Universidad Veracruzana”. En su intervención, el rector resaltó el orgullo de participar en el homenaje tan merecido por 30 años de labor académica. Luego de leer un resumen de la trayectoria académica y como investigador de Renato Prada Oropeza, Raúl Arias aseguró que a los xalapeños nos enorgullece que un boliviano haya elegido esta ciudad como su patria. Agradeció los 30 años que el académico ha dedicado para que la UV sea una casa de estudios mejor y por educar y formar profesionales más dignos y críticos. Deseó que esta nueva etapa de su vida siga siendo productiva, llena de aportaciones y de éxito. Finalmente, reiteró que podrá seguir considerando a la UV como suya. |
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Renato Prada en breve |
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| Cursó
el doctorado en Lingüística en la Université Catholique
de Lovaina, Belgique, y el doctorado en Filosofía en la Università
degli Studi di Roma, Italia. Las líneas de investigación
que ha desarrollado son en las áreas de hermenéutica,
semiótica y teoría literaria. A partir de 2001 es nivel
III del Sistema Nacional de Investigadores. En 1969 recibió el Premio Internacional de Novela “Casa de las Américas” por Los fundadores del alba. En el mismo año y por la misma novela ganó el Premio Nacional de Novela “Erich Guttentag”. En 1967 y 1968 ganó el Premio Nacional de Cuento “Edmundo Camargo”, de Bolivia. Entre los libros que ha escrito destacan El discurso-testimonio y otros ensayos, Literatura y realidad, La narrativa de Sergio Pitol, Análisis e interpretación del discurso narrativo, La constelación narrativa de Ignacio Solares, Poética y liberación en la narrativa de Onelio Jorge Cardoso, Los sentidos del símbolo, La autonomía literaria y Lenguaje narrativo. Además de innumerables ensayos, también realizó las siguientes traducciones: La gramática narrativa de Greimas, de Paul Ricoeur; Análisis estructural de la narración, de Claudine Gothot-Mersch; y El contrato de veridicción de A. J. Greimas. También ha sido académico en la Facultad de Filosofía de la UV y las maestrías en Literatura Mexicana y Filosofía. |
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