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Consejera
del IFAI
Rendir cuentas fortalece a la
autonomía universitaria: Marván
Alma
Espinosa |
La
rendición de cuentas en el ámbito educativo es específica;
no puede ser igual que en un congreso, una secretaría de
estado o la PGR |
María
Marván dijo que la transparencia y rendición de cuentas
exigen la libertad de cátedra, de expresión e investigación
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El
que las universidades públicas pongan su información
a disposición del público, ideen e implementen mecanismos
de transparencia y que cualquiera pueda pedir información,
lejos de debilitar la autonomía universitaria, la fortalece,
aseguró la consejera del Instituto Federal de Acceso a la Información
(IFAI), María Marván Laborde, durante su participación
en el encuentro Transparencia, rendición de cuentas y acceso
a la información en universidades públicas, organizado
por la Universidad Veracruzana (UV) y el IFAI.
“La transparencia y la rendición de cuentas suponen y
exigen la libertad de cátedra, de expresión, de investigación
científica y el pluralismo. Las universidades públicas
son cuna de todos estos valores y son los mejores baluartes de la
misma”, sostuvo.
En esta lógica –dijo–, tenemos que entender que,
en la medida que las universidades viven de recursos públicos,
deben tener una cierta capacidad de autorregulación otorgada
por las entidades públicas mediante una ley expedida por el
Poder Legislativo, pero que no las exime de rendir cuentas y hacer
claras las decisiones sobre el ejercicio presupuestal y el rendimiento
universitario.
La consejera del IFAI dijo que la rendición de cuentas en el
ámbito educativo tiene problemas específicos, y que
no puede ser igual pedir cuentas a un congreso, a una secretaría
de estado o la PGR, que a una universidad pública.
“Las universidades públicas tienen por lo menos cuatro
dimensiones distintas a través de las cuales tendríamos
que estar pidiendo transparencia a las universidades de manera permanente:
una dimensión burocrática (respeto a los procesos administrativos);
en sentido profesional (que atañe a profesores e investigadores);
en el desempeño propio de la institución educativa (que
la gente pueda comparar los niveles de cada institución); y
en términos de mercado (concerniente a la elevación
de la calidad educativa”.
Marván Laborde dijo que si los universitarios logran transformar
su mentalidad como funcionarios, profesores y estudiantes y se sintonizan
en la lógica de que la educación universitaria pública
es una apuesta de la sociedad por ellos, la rendición de cuentas
adquiere otra dimensión muy distinta y es sumamente importante.
La funcionaria afirmó que para hablar de transparencia y acceso
a la información hay que partir del hecho de que estos conceptos
son en alguna medida valores nuevos en la política nacional
“Hoy nos atrevemos a afirmar que no hay democracia sin transparencia
y que no hay democracia sin acceso a la información. Es importante
entender por qué llegamos ahí y de qué manera
esto puede transformar nuestro quehacer cotidiano en nuestra relación
con el gobierno. Afirmo, sin temor a equivocarme, que el que hoy hayamos
incorporado transparencia y acceso a la información como valores
fundamentales refleja una transformación cultural”, explicó.
Dijo además que la transformación cultural más
importante que se está emprendiendo es convencer a todos y
cada uno de los mexicanos que el ciudadano tiene derecho a preguntar
y que los servidores públicos tienen la obligación de
responder. |
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