Año 6 • No. 266 • mayo 14 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
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La UV, sus libros y sus autores
Instituto de Artes Plásticas:
30 años de vanguardia

Rodolfo Mendoza Rosendo
Editorial de la Universidad Veracruzana

Se necesita un libro para guardar la memoria del hombre. El Instituto de Artes Plásticas de la Universidad Veracruzana ha creado el suyo: Instituto de Artes Plásticas 1977-2007: 30 años de vanguardia. A cargo de María Teresa González Linaje, este libro es la suma de experiencias y colaboradores que han ido dejando su vida y su obra en una institución que acaba de cumplir 30 años de formada.
La presentación del volumen corre a cargo de la coordinadora del mismo y de Víctor Manuel Alcaraz; la introducción es de Javier Puchetta, pintor y actual director del Instituto; y tres textos más dan cuenta de la labor artística no sólo en esta institución, sino en todo el estado de Veracruz: “La tradición artística en la Atenas veracruzana” de Francisco Morosini, “Para llegar a ser el Instituto de Artes Plásticas” de Ángel José Fernández y “Modelos de reconocimiento de los artistas plásticos en Xalapa” de Ahtziri E. Molina Roldán. Digamos que los anteriores textos son una suerte de presentaciones generales al cuerpo del libro, la verdadera razón del presente volumen es el esmerado trabajo “El Instituto de Artes Plásticas, un recorrido” que, aunque no aparece firmado, seguramente es de la autoría de la coordinadora del volumen.

“Historia del Instituto de Artes Plásticas de la Universidad Veracruzana” es, sin duda, el mejor y mayor documento que se ha escrito al respecto. En él se da cuenta año por año de la labor de esa institución, de sus miembros, de sus logros. Antes de 1972, fecha en que se transforma la vida artística en Xalapa, el Taller de Artes Plásticas, dependiente de la Universidad Veracruzana, había conocido épocas notorias en las que trabajaron artistas de reconocido prestigio como Mario Orozco Rivera, Alberto Beltrán, Rogelio Naranjo y Kiyoshi Takahashi. En aquel 1972 la vida en el Taller tenía carencias materiales e intelectuales. Los alumnos se quejaban del ausentismo laboral de los académicos, del plan de estudios, de materias teóricas que no estaban del todo cubiertas; en fin, el descontento por parte del alumnado era mucho y fundado. Los entonces alumnos Javier Puchetta, Rosalinda Band, Miguel Ángel Acosta y Javier Petrilli encabezaron una huelga que duró parte del año 1972 y hasta empezado el año 1974.

Por invitación del poeta Jaime Augusto Shelley, director de Difusión Cultural, llega Carlos Jurado a Xalapa para entablar una conversación con los estudiantes en huelga. Las ideas frescas y novedosas de Jurado rompieron la huelga y el trabajo artístico conoció, entonces, una de las mejores épocas en las artes gráficas veracruzanas. Jurado inauguró ocho talleres y contrató a artistas de primera línea para cubrir aquel ausentismo laboral; de tal manera se echaron a andar talleres bajo la tutela de Per Anderson, Myra Landau, Adrián Mendieta, Pepe Maya, Rafael Villar, Luis y Ana Luisa Vidal, y el mismo Jurado.

Entre 1974 y 1977 la plástica xalapeña vivió su mejor momento: la exposición “Presencia de Xalapa”, en el salón de la Plástica Mexicana fue, quizá, el inició del éxito de los artistas xalapeños. Después de eso vino la exhibición “Tecnología alternativa en la gráfica” en la galería José Clemente Orozco y más tarde los premios al mismo Jurado, a los estudiantes Javier Puchetta, Manuel Vera, Ambrosio Contreras, Adalberto Bonilla, Carlos Cano, Doris Vila, Iris Aburto, entre otros.

El Taller de Artes Plásticas llegó a tener tal fama que muchos estudiantes de la escuela Nacional de Artes Plásticas San Carlos de la UNAM desertaron para venir a tomar clases en el taller dirigido por Carlos Jurado. Y es en 1978 que después de la creación de ciertos organismos universitarios se conforma el Instituto de Artes Plásticas. Se podría seguir apuntando aquí la historia del Instituto, pero mejor será que el lector, por propio pie, transcurra por los caminos y las décadas que de vida tiene esta imprescindible institución de la Plástica Nacional.

Por último, no se puede dejar pasar la inclusión en este volumen del “Catálogo de los artistas del Instituto de Artes Plásticas”, en donde el interesado lector podrá ver un ensayo introductorio a la obra de cada artista, además de unas muy bien impresas reproducciones de la obra de los mismos.

Instituto de Artes Plásticas 1977-2007: 30 años de vanguardia es el modelo de libro que, para guardar la memoria de la Universidad Veracruzana, debieran tener todos los organismos que la conforman. Se puede conseguir en el Servicio Bibliográfico Universitario, Xalapeños Ilustres 37 y en la Feria Permanente del Libro Universitario, Hidalgo 9, Zona Centro.