Año 6 • No. 266 • mayo 14 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
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Pedagogos de la UV, a la par que en la UNAM: especialista del IPN

Dunia Salas Rivera


Zaira Navarrete Cazales, del Departamento de Investigaciones y Estudios Avanzados del CINVESTAV, del IPN

El de la UV es un pedagogo multifuncional, que puede desarrollar diversos quehaceres
La formación del egresado de la carrera de Pedagogía de la Universidad Veracruzana (UV) es muy sólida en conocimientos y prácticas, está a la par y hasta muy por encima que la de cualquier otra institución, incluyendo la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró Zaira Navarrete Cazales, del Departamento de Investigaciones y Estudios Avanzados del CINVESTAV, del Instituto Politécnico Nacional (IPN).

Navarrete Cazales, quien participó en el ciclo de conferencias Diálogos educativos que con motivo de la celebración del trigésimo aniversario de su fundación realizó la Facultad de Pedagogía de la UV, expresó que se debe acabar con el mito del descrédito por ser de universidades fuera del Distrito Federal.

“Los pedagogos de la UV sienten muchas veces como un descrédito al exterior, como que les hace falta formarse, entonces se cuestionan y creen que les falta mayor participación en eventos, socializar conocimientos, y por eso hay cierto temor al rechazo y de que sus trabajos sean poco valiosos”, dijo.

La investigadora, que realizó una tesis sobre la identidad social del pedagogo a partir del caso de los egresados de Pedagogía de la UNAM y de la UV, bajo la dirección de Rosa Nidia Buenfil y como lectora María de Ibarrola, explicó que la identidad del egresado de Pedagogía de la UV está definida por varios rasgos.

“El de la UV es un pedagogo multifuncional, que puede desarrollar diversos quehaceres, siempre y cuando tengan relación con el ámbito de lo educativo; los distingue su formación híbrida, que no solamente es teoría pedagógica sino también de las que nos aportan la psicología, filosofía, antropología, etc., y el campo ocupacional muy diverso”, agregó la especialista.

En su trabajo de investigación, Zaira Navarrete primero se planeta que la identidad tiene que verse no en forma cerrada y única, como una entidad o constituida en y desde sí misma, sino de una forma amplia, histórica y contextualizada.

En un análisis inter e intrainstitucional y tomando como objeto de estudio a los pedagogos de la UNAM y de la UV, en tres generaciones –50, 70 y 90–, la investigadora realiza un rastreo histórico de cómo se ha constituido el pedagogo profesionalmente, en el que involucra las concepciones y percepciones de los egresados y cómo se da el cambio de la concepción de la pedagogía, según la generación a la que pertenecen estos egresados de diferentes décadas.

La pedagogía es vista como una ciencia, es un rasgo que generaliza a los pedagogos de la UV y la UNAM en las tres décadas, definió: “En los cincuenta viene la emergencia de la profesión pedagógica, la carrera de Pedagogía es insertada a la Universidad; antes de ello solamente estaban las Normales como formadoras de profesores, de ahí que pedagogo era sinónimo de ser docente. En esa década conceptuaban a la pedagogía como una profesión que tenía que ver única y exclusivamente con la docencia”.

Navarrete Cazales comentó que posteriormente se dio un cambio y en los setenta el pedagogo no era sólo docente sino que podía cumplir múltiples funciones como la administración y la gestión: “En los setenta se volvió más crítico de su realidad social, a diferencia del pedagogo del cincuenta, cuando se centraba en la lectura y en el amor al saber”.

Esta concepción responde a que hay movimientos sociales en el 68 y el 70: “Se da la masificación, entonces el pedagogo se vuelve más crítico de su realidad, tiene participación y se inmiscuye más. En los noventa esta participación social es menor y el pedagogo está más en casa, es más institucional, se basa más en los libros y se muestra un poco apático de lo que sucede al exterior de la escuela. En los noventa son críticos pero no de la realidad social, sino de la teoría pedagógica”.