| Año 7 • No. 278 • Agosto 27 de 2007 | Xalapa • Veracruz • México |
Publicación
Semanal
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| En
el Teatro La Caja |
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| La niña de Tecún , dirigida por Austin Morgan, es una apuesta seria al lenguaje de los títeres que está muy lejos del corte didáctico infantil en el que generalmente se les ubica | ||
| Trata
de blancas, explotación infantil, prostitución, muerte
y la búsqueda del sueño americano son el contexto en
el que se desarrolla la obra teatral La niña de Tecún,
una apuesta seria al lenguaje de los títeres y muy lejos del
corte didáctico infantil en el que generalmente se les ubica;
se estará presentando los viernes, sábados y domingos
hasta el 9 de septiembre en el Teatro La Caja. Dirigida por Austin Morgan, egresado de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana (UV), la obra –inspirada en el cuento La Pequeña Tijuana, de Virginia Hernández, Premio Nacional de Literatura 2000–, la anécdota se desarrolla en Tecún Uman, un lugar situado en la frontera entre Guatemala y Chiapas y que guarda, en mucho, semejanza con su homónima del norte. Una serie de escenas yuxtapuestas distribuidas por todo el espacio en diferentes escenarios van enlazando la historia narrada por la protagonista, Armida, una niña llegada a un tugurio local para servir como criada, quien encuentra en “La Toña”, una muchacha del burdel, el cariño y apoyo para sobreponerse a la dura vida de aquel sitio. Atraída por las fabulosas historias que le narra su amiga, Armida es capaz de soñar un futuro más alentador para las dos. La relación de amor que surge entre estos personajes es el sustento esperanzador de ambas. Del destino de una depende el de la otra. A la par que narra su historia, la protagonista permite al público entrar en una parte de la vida de Tecún y va mostrando cómo es el mundo del resto de los personajes en la frontera. Así se conoce, entre otras, la historia de “Tambuco”, un enterrador afectado con retraso y que está perdidamente enamorado de “La Toña”. Este ser despreciado por los vivos, a quien se le achaca la maldición de atraer a la muerte con su presencia, es capaz de amar más allá de su propia existencia. En contraste está Yakusa, un oriental de malas mañas que busca su propia satisfacción por cualquier medio, sin ningún tipo de respeto por nadie. Un hecho inesperado para Armida le hace afrontar la dura realidad; sin embargo, “La niña de Tecún” se mantiene persistente hasta el final para conseguir los sueños anhelados junto con “La Toña”. Con la participación de los estudiantes de la Facultad de Teatro Rosa Eglantina, David Ike y Karina Eguia, quienes manipulan a los títeres, La niña de Tecún incluye música de Manu Chao, Mike Laure y Ramón Ayala; la técnica de iluminación es de Maribel Gómez Amezcua; el texto, la dirección y la edición musical son de Austin Morgan; la construcción de títeres, escenografía, utilería y espacios están a cargo de todo el grupo, y el vestuario, de Lupita Lozada. Las funciones de La niña de Tecún son en el Teatro La Caja, ubicado en la calle de la Pérgola sin número, Zona Universitaria, en Xalapa, hasta el 9 de septiembre, los viernes a las 20:30 horas, y los sábados y domingos a las 19:30. |
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