Año 7 • No. 284 • Octubre 8 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
Publicación Semanal


 Centrales

 General

 Entrevista

 Becas y oportunidades

 Arte

 
Deportes

 
Contraportada

 


 Números Anteriores


 Créditos

  A través de la Maestría en Salud Pública
Busca UV enfrentar obesidad y sobrepeso infantiles

Alma Espinosa
Más de diez millones de niños y jóvenes padecen estos problemas
En México existen más de diez millones de niños y adolescentes con sobrepeso y obesidad, lo cual se hace más alarmante si se piensa que hasta hace unos meses una parte de esta población registraba altos índices de desnutrición; lo anterior denota que existe un gran reto en materia de salud, por lo que la Maestría en Salud Pública de la Universidad Veracruzana (UV) prepara a los cuadros profesionales capaces de enfrentar el desafío.

Magdalena Álvarez Ramírez es egresada de la Maestría en Salud Pública con mención honorífica
Magdalena Álvarez Ramírez es egresada de la Maestría con mención honorífica por su tesis “Validación del índice de masa corporal (IMC) como medida de adiposidad en escolares”, en la que plantea la posibilidad de utilizar otro instrumento de medición del estado nutricio para complementar el diagnóstico del IMC, que no es certero para determinar la adiposidad o acumulación excesiva de tejido graso.

En entrevista, la también académica de la Facultad de Nutrición de esta casa de estudios explicó que a raíz de su participación en un programa de vigilancia alimentaria nutricia que la Facultad desarrolla con el municipio de Emiliano Zapata, comenzó a visualizar la necesidad de evaluar los instrumentos de medición con la finalidad de obtener resultados más certeros, sobre todo porque los índices de desnutrición están siendo desplazados por los de sobrepeso y obesidad en la población infantil.

Al observar este cambio, comentó, se dio cuenta que los niños presentan diferentes conformaciones fisiológicas que podrían no coincidir con el estándar que se había considerado para determinar el estado nutricio adecuado, como en el caso del IMC. Un factor que la impulsó a estudiar de fondo esta situación fue que la obesidad y sobrepeso se relacionan con las enfermedades crónico-degenerativas, por lo que es necesario cuidar la salud de los infantes.

Del estudio de validación que realizó obtuvo como resultado que el IMC no es suficiente para medir la adiposidad, por lo que empleó la técnica Impedancia Bioeléctrica, que consiste en pasar corriente eléctrica por el cuerpo para medir qué tanta resistencia encuentra; explicó que mientras más músculo y agua exista en el cuerpo más rápido pasará la corriente, en tanto que registrará mayor lentitud si encuentra en su camino menos agua y más cantidad de grasa.

De los mil 500 niños de entre seis y 12 años de 11 localidades de Emiliano Zapata que participaron inicialmente en el programa de la Facultad, sólo 800 cumplieron con los requisitos para realizar la prueba. Se registró que 17 por ciento de las niñas y 18 por ciento de los niños mostró sobrepeso y obesidad.

Con los registros se pudo observar que hay niños con obesidad de tipo metabólico con peso normal, lo cual los coloca en igual riesgo que los niños con peso superior a la media. Lo anterior se debe mantener en constante vigilancia porque, según la Encuesta Nacional de Salud, la obesidad infantil es un problema de salud pública.

La académica detalló que su estudio no tiene la intención de culpar a las madres de los niños obesos, pues no tienen la información adecuada o suficiente para alimentarlos de manera adecuada, principalmente después de la etapa preescolar; asimismo, indicó, la cultura y los propios hábitos son muy fuertes, como comer pan y tortilla para saciar el hambre en lugar de carne y verduras.