Año 8 • No. 289 • Noviembre 12 de 2007 Xalapa • Veracruz • México
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Además de cambiar manejo de recursos comunitarios
Políticas neoliberales generan migración cafetalera: experta

Edith Escalón

La migración cafetalera es una de las consecuencias de la aplicación de políticas neoliberales al campo veracruzano, aseguró Ana Isabel Fontecilla-Carbonell, investigadora del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la Universidad Veracruzana (UV).

“La reducción de los apoyos estatales al desarrollo rural, la liberación de los mercados de productos agrícolas y los cambios en el mercado del trabajo, han orillado a los campesinos a buscar alternativas para obtener ingresos adicionales, a veces con la única alternativa que tienen: migrar.”

Aseguró que el éxodo de un número cada vez mayor de campesinos “transmigrantes” del centro de Veracruz se atribuye a la severa crisis que ha enfrentado el sector cafetalero desde la caída del precio internacional del grano en el contexto de liberalización y apertura económica.

“De hecho, Veracruz es el quinto emisor de migrantes hacia Estados Unidos, una migración por objetivos que les permite a los familiares que se quedan en las comunidades afrontar despensas, resolver deudas atrasadas o hacerse de alguna propiedad”, comentó.

Esta dinámica, dijo, también genera cambios en la forma en que las comunidades manejan los recursos naturales a su disposición, e implican nuevas formas de uso, control, acceso y distribución de los beneficios derivados de los mismos.

Fontecilla, quien estudia en la UV las relaciones entre la migración internacional y el manejo de recursos naturales, aseguró que este último aspecto es el que ha llamado poderosamente la atención de especialistas de universidades y centros de investigación.

La investigadora explica: “Por un lado, con la migración internacional pareciera que la tierra pierde su valor como medio de subsistencia, disminuye la mano de obra disponible y se generan nuevas expectativas y necesidades, que hacen que las actividades agrícolas y de uso de recursos naturales se vean poco viables y atractivas”.

”Por otro lado, la propiedad de la tierra continua siendo fundamental para garantizar el sentido de pertenencia y seguridad económica entre aquellos que trabajan ‘del otro lado’ ”.

Aseguró que por eso muchas de las remesas enviadas por los veracruzanos a sus comunidades de origen han sido invertidas en actividades agrícolas o para mejorar las fincas, como si permaneciera en los emigrantes la esperanza de que las condiciones mejoren en el futuro y les permitan retomar la actividad cafetalera.