La
Universidad Veracruzana (UV), a través del Centro Virtual
de Investigaciones Multicidisciplinarias (Cevim), y la University
of Western Ontario (UWO), Canadá, firmaron una carta de intención
para formalizar la cooperación en materia de generación
de biocombustibles a partir de desechos agrícolas.
La firma se da luego de que investigadores de la UWO, Canadá,
invitaran a sus pares del Cevim a realizar experimentos conjuntos
para el mejor aprovechamiento de los residuos agrícolas.
En este evento, el rector de la UV, Raúl Arias Lovillo, sostuvo
que la generación de fuentes de energía alternativas
es un tema de importancia estratégica, no sólo para
Veracruz y el país, sino para el mundo entero, por lo que
la institución asume la responsabilidad de trabajar en él.
“Veracruz tiene un importantísimo capital natural que
debe aprovecharse de manera responsable y la UV tiene la infraestructura
y el capital humano para hacerlo, con lo que esta cooperación
potencia las capacidades de ambas instituciones para lograr mejores
y más importantes resultados”, aseguró.
Por su parte, el representante académico de la UWO, Franco
Berruti, dijo que la formalización de la cooperación
interinstitucional “es la realización de un sueño
que une a dos instituciones que comparten intereses y se encuentran
motivadas para aportar, cada una, sus capacidades en beneficio de
un proyecto que podría representar grandes beneficios, no
sólo para las universidades sino para la sociedad en general”.
Berruti recalcó que una de las principales aportaciones del
proyecto es dejar de ver a la biomasa (residuos agrícolas,
principalmente) como un desecho y convertirla en un recurso.
En su intervención, el director del Cevim, Roberto Bravo
Garzón, explicó que la cooperación entre las
dos instituciones surgió cuando la UWO y la empresa canadiense
AgriTherm (especializada en el desarrollo de este tipo de tecnología)
invitaron al Cevim a participar en las pruebas de un prototipo capaz
de generar bio oil a partir de residuos vegetales.
“El resultado del experimento fue absolutamente satisfactorio,
ya que se obtuvo 60 por ciento de bio oil con respecto de la biomasa
utilizada, destacando el resultado del bagazo de la caña
de azúcar, que obtuvo mayor rendimiento (alrededor de 10
por ciento más que otros residuos), razón por la cual
se elaboró la propuesta de convenio.”
Bravo Garzón dijo que el convenio incluiría intercambio
de experiencias académicas, reciprocidad en el uso de laboratorios,
intercambio de investigadores y formación de recursos humanos;
además, se plantea realizar experimentos en diferentes zonas
del estado de Veracruz con el prototipo creado por la UWO, para
lo cual se pediría apoyo del gobierno del estado de Veracruz.
“De ser exitoso su resultado en la entidad, los recursos que
representará las posibles utilidades de la venta del bio
oil producido, se destinarían a la compra de equipo, material
y reactivos de laboratorio del Cevim”, aseguró.
El biocombustible que se genera de esta maquinaria es una fuente
de energía sumamente versátil y con un mercado potencial
muy amplio (tan sólo la Unión Europea tiene proyectado
en un futuro próximo, prohibir el uso de diesel y sustituirlo
con este tipo de combustibles).
En la firma de la carta de intención estuvo presente, además
de las representaciones de las dos instituciones universitarias,
el vicepresidente de la empresa AgriTherm y su representante en
México, Jim Weaver y Francisco Javier García Sánchez,
respectivamente, así como investigadores
del Cevim.
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