| Año 8 • No. 304 • Abril 7 de 2008 | Xalapa • Veracruz • México |
Publicación
Semanal
|
Centrales
Editorial
General
Reportaje
Regiones
Becas
y oportunidades
Arte
Deportes
Contraportada
| Víctor
Junco y los actores veracruzanos en el cine nacional Roberto Ortiz Escobar roe_xal@yahoo.com.mx |
||
| En
una emisión anterior aludimos a dos veracruzanas que fueron
pioneras del cine nacional a principios del siglo pasado en el ámbito
del documental y los noticieros. Amén de que existen otros
cineastas fundamentales del cine mexicano nacidos en nuestro estado
(Fernando de Fuentes y Jorge Fons por mencionar la generación
de la época de oro y la de los setenta, respectivamente), en
esta ocasión voy a mencionar a actores veracruzanos que ocuparon
su tiempo en la creación de personajes para la pantalla grande,
y más recientemente para la chica. Si nos referimos a estrellas que entronizaron personajes cercanos al gran público, no podemos olvidar a Blanca Estela Pavón (nacida en Minatitlán), la inolvidable Chorreada de Nosotros los pobres y Ustedes los ricos. En estos filmes y a su lado se fogueó la entonces puberta Evita Muñoz Chachita (Orizaba). Si buscamos cómicos de diferente talante identificamos a Héctor Lechuga (Orizaba) y a Luis de Alba (Veracruz). En la música tropical cercana al melodrama arrabalero se encuentra la inconfundible Toña la Negra (Veracruz) y más recientemente Yuri (Veracruz), una cantante venida a menos no obstante su potente voz. Como actores recios, el constantemente sobreactuado Narciso Busquets (Orizaba) y el versátil creador de personajes definitivos Ernesto Gómez Cruz (Veracruz). Cubriendo a todos ellos con su manto protector maternal se encuentra la indispensable Sara García (Orizaba). En los últimos años ubicamos a Salma Hayek, la única mexicana que ha triunfado en el Hollywood contemporáneo y que viera la luz en el puerto de Coatzacoalcos. Estos son algunos de los actores que en diferentes épocas han dado lo mejor de sí a un público ávido de emociones. Por ahora me referiré a un actor que nació en Gutiérrez Zamora en 1917 y murió en la ciudad de México en 1988. Quiere decir que este año se cumplirá el aniversario noventa y uno de su nacimiento. Antes de ingresar al cine y por su magnífica complexión física, Víctor Junco fue salvavidas, campeón nadador, marino y estudiante de aviación civil. Se inició como extra en la industria cinematográfica en 1935 con Martín Garatuza y en 1944 se impuso como primer actor en Las abandonadas (1944, Emilio Fernández), donde interpreta un doble papel al lado de Dolores Del Río. En La bien pagada (1947, Alberto Gout) se casa con una infiel María Antonieta Pons vuelta prostituta y artista de cabaret. En Los viejos somos así (1948, Joaquín Pardavé) será un tahur enamorado de la joven de quien trató de abusar (Elsa Aguirre). Nuevamente con María Antonieta Pons participa en la segunda versión de La mujer del puerto (1949, Emilio Gómez Muriel) como el hermano incestuoso que desencadena la tragedia. Como apuesto vividor dedicado al contrabando, será el amante de una María Félix dominante (Doña Diabla, 1949, de Tito Davison) y al lado de Ninón Sevilla asumirá al correcto esposo de una mujer que por amnesia se torna bailarina y amante del dueño de un cabaret (Aventura en Río). Con su presencia en 134 cintas, Junco fue reconocido con un Ariel y la medalla Amparo Arozamena. Caballeroso, amigo y defensor de los derechos sindicales, fue fundador de la ANDA y se convirtió en el primer presidente de la Asociación Nacional de Intérpretes. No olvidemos que Víctor tuvo un hermano de nombre Tito quien participó también en el cine en películas como Aventurera (1949, de Alberto Gout), donde interpretaba a un padrote que metía en la prostitución y manipulaba caprichosamente a una Ninón Sevilla portentosa y de armas tomar. |
||
|
|
||