| Año 8 • No. 312 • Junio 2 de 2008 | Xalapa • Veracruz • México |
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Semanal
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Contraportada
| Denuncia
sólida a la injusticia social Presentan Política hidroagrícola y cambio agrario en Tehuantepec Gina Sotelo |
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En
breve someterán a la aprobación de la Junta Académica
el nuevo plan de estudios |
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| Política
hidroagrícola y cambio agrario en Tehuantepec, Oaxaca, de Yanga
Villagómez, fue presentado en Xalapa por Mariano Báez
Landa y Danú A. Fabre Platas, como parte del primer Simposio
Ciencia, Tecnología y Sociedad. El libro narra la forma en la que estas decisiones aplicadas a nivel nacional tuvieron sus consecuencias al ser realizadas en una zona indígena, donde la forma de propiedad de la tierra es comunal, y la fragmentación a la que dio origen en el terreno de la confrontación política local. A partir de la década de los setenta hasta nuestros días, la efervescencia social y política ha sido la constante en la región del istmo oaxaqueño, una de las regiones más importantes en la generación de riqueza económica en el estado de Oaxaca. Con la actual política de desregulación del sector agrícola y con la reformulación de la Ley Nacional de Aguas, a lo que se añade la discusión internacional sobre el manejo de recursos hídricos, el tema del agua es fundamental para las naciones, las sociedades y las economías de los países que como México poseen aún una cantidad importante en este tipo de recursos, así lo expresa en su libro Yanga Villagómez. En la presentación, Báez Landa, del CIESAS-Golfo, reconoció el poder contar con un texto interesante, actual y con una temática que le hiciera evocar nuestra propia “veracruzaneidad”. Habló de cómo este texto toca importantes temas de zonas en conflicto, que al ser vecinos Veracruz y Oaxaca comparten problemáticas. “Este libro me permitió recuperar el interés por temas que pareciera que están expatriados con las modas intelectuales como la globalización”. Asimismo, destacó el interés por el destino de las sociedades indígenas en México y la polémica sostenida entre campesinos y sociedades urbanas. Los campesinos remiten a la tradición y al conservadurismo, mientras que las sociedades industriales son relacionadas con la modernidad, dijo. Respecto del objetivo del libro, dijo que el autor exalta la importancia que tiene la tierra para la reproducción de los grupos indígenas y sus sociedades, temas que en el concierto nacional son calificados como temas “sin chiste”. Báez Landa se preguntó ¿cuál es el futuro del mundo rural y qué hay que hacer respecto de su participación política?, y concluyó que la guerra del petróleo, tan en boga hoy, en día será en breve desplazada por el peso de la guerra del agua. Fabre Platas, investigador del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales de la UV, también agradeció al autor la elaboración de este texto que en 250 cuartillas con 50 de anexos cumple todos los niveles de exigencia, calidad y rigor que es sello de garantía de las publicaciones del Colmex. En el texto encontramos calidad, respaldo, la trayectoria del autor y una temática convocante que hace de ésta una obra valiosa: “Encontramos estudios profundos sobre los escenarios de desarrollos de sustentabilidad que transgreden territorios. Sustentabilidad y desarrollo son los temas transgresores que provocan miradas pluridimensionales”. Mencionó además que hablar de Oaxaca es hablar de gran parte del territorio veracruzano, tema tratado en el libro con mucha destreza. Y comentó: “Es este libro una denuncia sólida a la injusticia social, un texto fresco y bien escrito, una lectura obligada para todo aquel estudioso de las territoriedades rurales”. |
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