Bernardo García Díaz, prolífico académico del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la UV, presentó el sábado pasado uno más de sus libros de gran formato, arropado con una bella selección fotográfica y un estudio
histórico de su autoría: Tlacotalpan. Patrimonio de la humanidad.

De alguna manera son dos libros en uno, nos dice el investigador. En su primera parte está constituido por un texto histórico, que cubre la historia de Tlacotalpan a partir del siglo XVI, y lo que se pretende en él es señalar cuáles son los ingredientes económicos, culturales y sociales que se combinaron para dar ese resultado llamado Tlacotalpan, porque mucha gente no se imagina hallar en medio de la llanura costera y de los hatos de ganado ese logro urbano con tal fuerza cultural y belleza.

El ensayo explica el auge de Tlacotalpan como importante puerto fluvial, abierto a los vientos del mundo y mucha influencia europea, enriquecido con una serie de imágenes que incluyen planos coloniales, pinturas, litografías,
fotografía antigua y moderna, etcétera, todo ello con una notable calidad en la impresión que lo hace un libro imprescindible en la biblioteca de cualquier veracruzano orgulloso de sus orígenes.

Asimismo, no sólo propone una reconstrucción histórica a partir del "diálogo entre texto e imagen"; también en su segunda parte incluye un ensayo fotográfico en color del Tlacotalpan actual, un trabajo elaborado principalmente
por Pedro Hiriart, aunque también se incluyen fotos de Ana Laura Delgado, coordinadora de la obra patrocinada por el gobierno del estado de Veracruz.

Se trata, en suma, de una obra completa y ambiciosa que no existía para un lugar tan importante para los veracruzanos como Tlacotalpan, y que alude a todos aquellos valores que hacen de este pequeño y bello municipio un´verdadero patrimonio de la humanidad, tal como la UNESCO lo ha nombrado dado el notable estado de conservación que presenta su traza urbana en conjunto, tanto en el exterior como en el exterior de sus casas, además de la fuerza de su acervo cultural, patente en sus innumerables artistas y artesanos, entre ellos
talentosos decimeros, músicos, lauderos, pintores, ebanistas, tejedores y demás.

Tlacotalpan. Patrimonio de la humanidad, fue presentado en medio de un fandango amenizado por jaraneros y decimeros, en plena Feria de San Miguel, en el teatro Netzhualcóyotl de Tlacotalpan. Los presentadores fueron Álvaro Zarrabal, Francisco J. López, Ricardo Pérez Montfort, Rafael Hermida Lara y Bernardo García Díaz.