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Boca
del Río, Ver.- El cambio que ha experimentado el ámbito
político de nuestro país también modifica la
agenda de la investigación electoral, que ahora debe enfocarse
más hacia la nueva gobernabilidad democrática, aseguró
José Woldenberg, consejero presidente del Instituto Federal
Electoral (IFE), al inaugurar el XIII Congreso Nacional de Estudios
Electorales, realizado en la USBI- Mocambo del 21 al 23 de noviembre
y organizado por el IFE, la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales
(Somee) y la UV.
El secretario Académico de la UV, Raúl Arias Lovillo,
afirmó que en la marcha de una democracia electoral en nuestro
país se ha logrado un avance sustantivo al consolidarse la
llamada ciudadanización de los organismos electorales. La
reforma electoral de 1996, cuando se formaliza la autonomía
del IFE y otorga su dirección a un conjunto de ciudadanos
sin partido, "será un paso importante en el camino para
garantizar la limpieza de las elecciones y la equidad en la competencia
electoral que han propiciado la alternancia política en municipios,
estados y en el gobierno federal".
Sin embargo, añadió, "el camino aún es
largo y debemos seguir discutiendo y analizando el desarrollo de
los procesos electorales en nuestro país, el papel de los
partidos políticos y el comportamiento electoral de los ciudadanos,
así como continuar la reflexión para consolidar la
cultura democrática".
Leonardo Valdés Zurita, presidente de la Somee, señaló
que con las nuevas condiciones ya puede hablarse de elecciones confiables
y altamente competitivas, de un sistema de partidos más complejo,
así como de una mayor participación ciudadana en laconstrucción
de la vida política del país.
Añadió que la Somee se encuentra en una etapa de madurez
para responder a las expectativas de sus asociados y del entorno
social, constituyéndose cada vez más como un espacio
interdisciplinario y de encuentro con los académicos, los
funcionarios electorales y los ciudadanos en general.
Es por ello que el Congreso Nacional de Estudios Electorales atendió
diversos tópicos como cultura política y educación
cívica, estudios de opinión, manipulación del
voto, transición y consolidación democrática,
consecuencias de la alternancia política y estudios de género,
sin faltar temas clásicos como geografía de la representación,
historia de los diversos procesos locales y federales, partidos
políticos, constitución de una nueva cultura política
y ciudadana, y emergencia de propuestas y reformas.
José Woldenberg dijo que la investigación electoral
en nuestro país ya no se centra tanto en los procedimientos
y herramientas que hacen posible la elección, sino en fenómenos
más complejos como la medición e interpretación
de los 'humores' políticos, el análisis de las tendencias
de la votación, las estrategias de campañas, el perfil
de los votantes, la conducta de la clase política, la vida
interna de los partidos, el diseño constitucional para un
gobierno dividido y las disyuntivas o dilemas de la nueva gobernabilidad
democrática.
Se enfocó en tres asuntos que, a su parecer, centran el debate
y modelan la calidad de las democracias contemporáneas: el
financiamiento de la contienda política, el comportamiento
de los partidos políticos y el papel y calidad de los medios
de comunicación. Una agenda compartida por las distintas
democracias en el mundo y temas que fueron ampliamente debatidos
durante el congreso.
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