| Año 6 • No. 250 • diciembre 11 de 2006 | Xalapa • Veracruz • México |
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Contraportada
| La
clave de su éxito está en su empeño
Destacan de nuevo estudiantes de piano de la Facultad de Música Gina Sotelo |
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| Es reconocido el talento de dos jóvenes en Costa Rica y Cuernavaca | ||
| Además
de conocer cómo es el mundo exterior, fuera del cobijo y el
cuidado personalizado de sus profesores, el que los estudiantes –en
este caso de la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana
(UV)– se enfrenten en concursos a competidores nacionales e
internacionales, les da una madurez y experiencia que se hace evidente. Yolanda Tapia y Ricardo Rodarte, alumnos de la pianista Patricia Castillo, destacaron en el 4o Concurso Internacional de Piano María Clara Cullell de Costa Rica, y en el Concurso Nacional de Piano Claudio Herrera en Cuernavaca, Morelos, respectivamente. Ambos dejaron claro en el escenario que con dedicación, actitud, esfuerzo y supervisión adecuada se puede estar a la altura de los mejores jóvenes ejecutantes. |
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Yolanda Tapia y Ricardo Rodarte. |
Por
vez primera en la historia de la facultad una estudiante es seleccionada
en un concurso internacional. Se trata de Yolanda, quien, aunque no
obtuvo uno de los dos únicos premios, fue finalista, proeza
enorme si se considera el nivel de los contrincantes a los que se
enfrentó. Llevado a cabo del 21 al 29 de octubre, compitió con otros 24 jóvenes de Venezuela, Colombia, Costa Rica, México, Panamá, Nicaragua y Honduras, interpretando música de Bach, Haydn, y la pieza oficial del concurso, la Danza de los Gnomos de Julia Fonseca. La competencia fue muy reñida y la organización del concurso le encantó, pues convivió en su hotel y restaurante de estudiantes con sus contrincantes, llegándolos a conocer e interactuar con ellos. |
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Cabe destacar que el primer lugar de las dos categorías fue
para un par de estudiantes cubanos, alumnos de la pianista Teresita
del Junco (son ya 150 los premios de alumnos de esta notable pianista).
Para su tutora, la participación de Yolanda es muy importante para la universidad porque ganó experiencia y ejecutó un repertorio de altísimo nivel: “Tocó muy bien, los jurados la felicitaron mucho y estamos muy orgullosos con el logro. Un concurso internacional es uno de los retos más adecuados a los que tienes que enfrentarte en la carrera como pianista”. Antes de ir al concurso la joven llegó a estudiar hasta 12 horas diarias, pero normalmente estudia de cuatro a seis. A sus 18 años ha hecho muchos sacrificios, como estudiar en una secundaria abierta para dedicarle más tiempo al piano. Ricardo Rodarte estudia el séptimo semestre y obtuvo el tercer lugar en el Concurso Claudio Herrera el pasado 25 de octubre enfrentándose a 15 participantes de Colima, Durango, Estado de México, Pachuca y Distrito Federal, interpretando música de Bach, Beethoven, Chopin, Manuel M. Ponce y Ravel. Seguro de sí mismo, el joven estudia sólo dos horas al día (a veces ninguna), toma su distancia y siempre regresa al piano con gozo. Llegó solo al piano, porque –en sus palabras– “se le ocurrió” cuando estaba en la casa de la Cultura de Hermosillo, Sonora. Ahora este premio le reporta un nuevo gozo, pero sin dejar de pensar que en la vida hay que tener un equilibrio: “Yo tengo mi vida normal, salgo al cine y hago cosas. Si quieres ser el mejor, siempre habrá alguien arriba, por eso hay que disfrutarlo y tomárselo con calma”. Aunque contentos los jóvenes, lamentan no encontrar el apoyo que necesitan por parte de sus superiores y sociedad en general que no les reconoce el esfuerzo. Ellos comentan: “Cuando dices que estudias música siempre te preguntan, ‘sí, pero qué carrera’, o te dicen: ‘¿se estudia el piano?, ¿hay carrera de eso? No hay tanto reconocimiento para esta carrera, que es tan difícil y demandante como cualquier otra”. Añaden que todos los días tienes que estudiar repertorio, escuchar más obras, pues la música es infinita y hay que ser muy creativos: “Y la gente no cree que estudies, que dejes de hacer cosas que hacen los jóvenes de nuestra edad, por eso el ganar premios o salir del país hace que todo valga la pena”, añaden contentos. Para viajar a Costa Rica, Yolanda recibió directamente el apoyo del gobernador del estado, Fidel Herrera Beltrán, quien le pagó el boleto de avión y otros gastos. Ricardo estuvo en Cuernavaca con sus propios medios, pagó su hotel y sus comidas, pues era más grande el deseo por competir y, ahora, su premio es la respuesta a su esfuerzo. |
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