Año 8 • No. 314 • Junio 16 de 2008 Xalapa • Veracruz • México
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Publica Tramoya número in memoriam
dedicado a Carballido

Gina Sotelo

La celebración y el luto se combinan en el más reciente número de la revista Tramoya: por un lado, cumple ya 32 años de ser el principal órgano de difusión teatral en el país y, por el otro, se dedica de manera cariñosa al maestro Emilio Carballido (1925-2008).

La solemne cubierta de la publicación anticipa el carácter del contenido; sobre un fondo en riguroso negro aparece una fotografía de un joven Emilio. El rostro es tranquilo, pensativo incluso; detrás de sus inseparables gafas se aprecia esa mirada entre pícara e inquisitiva que lo caracterizaba.
Las palabras de introducción al número 95 de la revista pertenecen al propio Emilio: “¿Qué hemos hecho en 32 años? Calculo, a ojo de buen cubero, cerca de 600 obras desconocidas en México. Del mundo rescatamos material procurando no usar países conocidos como Estados Unidos, Francia o Inglaterra. Hemos descubierto autores magníficos y desconocidos. Podría seguir enumerando cosas, pero se piensa en lo que viene”.

Tras esta bienvenida, hay un texto de Raúl Arias Lovillo, rector de la Universidad Veracruzana (UV), quien dice: “Emilio Carballido –un poeta de la escena– es y sigue siendo un profeta en su tierra, uno de nuestros hijos predilectos, un universitario de la más pura y noble cepa”.
Ignacio Escárcega, Coordinador Nacional de Teatro del INBA, dice: “Aquí sigue Emilio, en las páginas de Tramoya, en los parlamentos legendarios de muchas de sus obras, en su buen olfato y voracidad como lector de todo tipo de textos, de viajes, de comidas, de los gustos y placeres; talento para la vida y para la escena”.

La escritora y académica Esther Hernández Palacios describe a Emilio como un hombre íntegro, como un luchador social a contracorriente, que nunca traicionó sus ideales, ni renunció a sus deseos: “Siempre defendió sus convicciones por muy polémicas o discordantes que parecieran; hizo realidad sus sueños y nos convidó a compartirlos”.

El escritor y periodista Juan Villoro, en un texto en el que narra el inicio de su amistad, nos dice cosas como ésta: “Ajeno al esnobismo, abría un libro de mi idolatrado Thomas Bernhard y opinaba ‘Esto es aburridísimo’. No hacía falta preguntarle por qué leía a este eminente colega. A los dos minutos estaba sumido en una siesta feliz. Despertaba con ánimos de hacer muchas cosas a la vez. La principal era adoptar un gato”.

Sabina Berman, dramaturga, poeta y directora de teatro dice: “Carballido tenía dos secretos. El primero era que en un día le cabían dos [días]. Nunca he conocido a un escritor menos atormentado y menos inseguro. ¿Y por qué habría de haber sido atormentado o inseguro si su segundo secreto era una sincronía perfecta con el público?”.

Son más de una treintena de textos de amigos, compañeros y personalidades del mundo de las artes para quien Emilio significó un ser humano pleno, generoso y próspero, pilar del teatro mexicano contemporáneo, entre ellos se encuentran Víctor Hugo Rascón Banda, Selma Ancira y Tere Valenzuela.

El número de Tramoya incluye también la obra hasta hoy inédita Un gran ramo de rosas, cuyo estreno mundial será en agosto del presente año con dirección de Alejandra Gutiérrez. Carteles, fotografías y la cronografía de su obra completan el número.

Tramoya se puede localizar en el Servicio Bibliográfico Universitario en Xalapeños Ilustres 37. También puede comunicarse al teléfono
817-29-54, y al correo electrónico hecherrer@yahoo.com.mx.