|
|
Afirma
Benjamín García Páez, investigador de la
UNAM
Renunciar al control de hidrocarburos, grave riesgo social y político
Juan Carlos Plata
|
Cuando en México hay tanta pobreza, tantas desigualdades sociales
y económicas, el que el Estado renuncie a la administración
de los hidrocarburos es llevar al país a un punto de inestabilidad
y de grave riesgo social y político, sostuvo Benjamín
García Páez, académico e investigador de la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM).
“Como sucede en muchas otras esferas de la realidad económica
y social, el Estado debe delegar lo delegable al sector privado pero
retener lo fundamental, no puede permitirse perder el control del
proceso, ése es un punto de equilibrio que las iniciativas
presentadas por el Ejecutivo no tienen, y básicamente se encaminan
a la subordinación”, aseguró.
García Páez señaló que en este tema se
deben evitar los fundamentalismos, es necesario encontrar un punto
de equilibrio en el cual la estrategia fundamental, la estrategia
principal de Pemex siga en manos del Estado.
“Sabemos que el Estado no ha hecho una administración
pública muy satisfactoria; sin embargo, cuando una sociedad
constitucionalmente sigue controlando y poseyendo los recursos siempre
hay posibilidad de mejorar las instituciones, mejorar el gobierno
para que las cosas se hagan mejor”, dijo.
El académico sostuvo que el conjunto de reformas presentado
al Poder Legislativo, prácticamente, dice que el nuevo Pemex
tiene que ser construido por el sector privado, dejándole a
los mexicanos un papel secundario y decorativo, pero hay un parte
fundamental del país que piensa que los hidrocarburos deben
conservarse para el servicio de México.
“Estas iniciativas se basan en una desconfianza de las posibilidades
que tiene la empresa para salir de los problemas que enfrenta, pero
hay un grupo muy grande de académicos que pensamos que es necesario
hacer un balance mucho más mesurado, hay que reconocer que
Pemex tiene técnicos y profesionistas que son probos y muy
capaces y que tienen que participar en este proceso de reforma”,
dijo.
Respecto de la operación financiera de la empresa paraestatal,
García Páez señaló que es importante considerar
que debe haber cambios fundamentales, al margen de la reforma energética
–como la autonomía administrativa y de gestión–,
con los que se puede lograr la flexibilidad y autonomía que
la empresa necesita y que no esté mediada por la Secretaría
de Hacienda.
“En distintos foros ha quedado claro que la superación
de las problemáticas de Pemex implica la necesidad de hacer
ajustes en otros ámbitos, como por ejemplo, la misma reforma
del Estado. El asunto de la reinversión productiva es muy importante,
teóricamente y en la práctica; dos terceras partes de
la inversión tienen que ser financiadas con el coeficiente
de retención de ingresos, que en la actualidad Pemex prácticamente
no puede utilizar”, sostuvo. |
|