Este año termina muy bien para los estudiantes y académicos de la Facultad de Ingeniería Mecánica Eléctrica de la Universidad Veracruzana (FIME), pues con la intervención de su Patronato fue posible mejorar y dotar de equipo a casi el 100 por ciento de sus instalaciones, y ya están esperando al 2002 con nuevos planes para continuar con este trabajo que redundará en el beneficio de todos.

¿Qué hay de nuevo?

Para empezar podríamos situarnos en el Laboratorio de Máquinas Eléctricas, un espacio que ha sido dotado, al igual que otros laboratorios de la facultad, de nuevos prototipos que facilitan el aprendizaje de muchos procesos necesarios para la formación básica de los estudiantes.

El recorrido puede seguir por la Sala Audiovisual, que recientemente fue equipada con una nueva televisión, una computadora y un clima, además de que fue pintada y mejoraron todas sus condiciones.

La Sala y el Centro de Cómputo, que cuentan actualmente con 20 y 40 equipos respectivamente, también fueron motivo de atención. Ahora poseen un nuevo servidor, todas las computadoras tienen acceso a Internet y sus instalaciones son más cómodas. En el nuevo aspecto de los salones de clase, la intervención de los estudiantes fue decisiva, pues fueron ellos quienes los rasparon, limpiaron y pintaron y, por si fuera poco, ¡construyeron sus propias mesas de trabajo!

Esta última tarea fue una iniciativa del grupo 904, quienes expusieron su intención de construir mesas de fibra de vidrio para sustituir a las que se encuentran en mal estado. La dirección de la facultad se entusiasmó con la idea,
dotó de material a los jóvenes, ellos pusieron manos a la obra y el resultado ya se puede ver en las aulas, que se encuentran estrenando mobiliario, pues, además, les llegaron sillas y persianas nuevas.

Estas son sólo algunas de los mejoras más destacadas que pueden observarse, pero la ampliación de espacios y los cambios de lámparas, instalación de nuevos contactos, compostura de chapas y muchos más detalles, imposibles de enumerar siguen constituyendo un trabajo diario en la FIME, que a decir de su director, Rafael Lozano, aún no concluye.