Xalapa, Ver.- Luego de su explosivo crecimiento en la última década del siglo pasado, en que se abrieron más de dos mil nuevas opciones, los programas de estudios de posgrado deberán ser analizados a la luz de estándares de calidad y hacer un esfuerzo mayor por atender los procesos educativos y evaluar sus resultados, planteó el subsecretario de Educación Superior e Investigación Científica de la SEP, Julio Rubio Oca, durante la apertura del XV Congreso Nacional de Posgrado.

En el Museo de Antropología de Xalapa (MAX), en presencia del titular de la SEC, Juan Maldonado Pereda, y del rector Víctor Arredondo, el funcionario federal dijo que el incremento en nuevos posgrados contribuyó a enriquecer la oferta educativa del sistema de educación superior, a grado tal que la tasa de crecimiento anual fue de 13 por ciento, incrementando en cerca de 200 por ciento el número de egresados.

Pese a reconocer que ello ha contribuido a contar con un mayor numero de profesionales, científicos y humanistas que hoy están impulsando el desarrollo de nuestro país, Rubio Oca señaló que no se cuidó lo suficiente la calidad de dichos programas.

Añadió que de los más de tres mil 500 programas de posgrado que hoy existen en México, sólo unos 500 han sido reconocidos por el padrón de excelencia del Conacyt. Esta situación -continuó- ha hecho vislumbrar a las instituciones de educación superior (IES) que en los próximos años su esfuerzo deberá estar orientado a mejorar la calidad de la educación en todos sus niveles y tipos: "Particularmente en el caso del posgrado, necesitamos hacer un esfuerzo por incorporar en todas nuestras instituciones procesos de mejora continua".

En ese tenor, el rector Víctor Arredondo exhortó a los participantes en el Congreso Nacional de Posgrado a empeñar su mejor esfuerzo en la consecución de un posgrado que apuntale el desarrollo académico, económico, político, social y cultural tanto de las IES como del país.

"Tenemos que lograr las condiciones indispensables para afianzar cada vez más el importante proceso de descentralización de la capacidad de investigación y desarrollo tecnológico, así como de la consolidación de núcleos académicos en todas las entidades del país, pues sólo así tendremos la posibilidad de definir estrategias de crecimiento desde nuestros propios núcleos académicos", apuntó.

Dijo que esta oportunidad resulta ideal para sentar las bases para el fortalecimiento de redes de colaboración y para la vigorización de los posgrados, aprovechando las grandes perspectivas que brindan las nuevas tecnologías de la comunicación y estableciendo modalidades como la educación a distancia y la universidad virtual.

Sergio Guevara Sada, director del Instituto de Ecología AC, destacó que, en México, el número de científicos, tecnólogos y de instituciones que se dedican a la ciencia y la tecnología todavía es muy pequeño con relación a la población y a las necesidades del país. Por ello, el posgrado es la forma más directa e importante para formar científicos y técnicos que impulsen el desarrollo de nuestra nación.

Precisó que, a la fecha, sólo 25 mil personas están aplicadas a las labores de investigación y desarrollo en México, y aspiramos a tener en 2006 a 80 mil personas incorporadas a esos trabajos. "Tal esfuerzo implicará el mejoramiento sensible de la calidad de nuestros posgrados".

El posgrado, dijo, no debe ser sólo una forma de preparar personal de alto nivel, sino también erigirse como un mecanismo de reflexión para analizar nuestra situación actual y lograr cristalizar el proyecto de país al que aspiramos.

Por su parte, Rosaura Ruiz Gutiérrez, directora general de Posgrados de la UNAM, dijo que es a partir de la década de los setenta cuando las distintas universidades manifiestan un fuerte interés por impulsar los estudios de posgrado, pero coincidió con Rubio Oca en que el crecimiento en su oferta no siempre compaginó con los requisitos de calidad y pertinencia.

Ruiz Gutiérrez señaló que las políticas de desarrollo del posgrado carecen de un hilo conductor y de una planeación de largo alcance, pues, en la mayoría de los casos, han obedecido a satisfacer demandas particulares, a presiones de momento o a iniciativas en turno, y agregó: "Debemos reconocer que comenzamos el tercer milenio con la ausencia de un sistema nacional de posgrado que permita elaborar planes suficientemente articulados a corto, mediano y largo plazo"

En la sesión, Julio Rubio Oca tomó la protesta a los integrantes del nuevo Consejo Directivo del Congreso Nacional de Posgrado, que quedó integrado por Rosaura Ruiz Gutiérrez, directora general de Posgrados de la UNAM; Luis Humberto Fabila Castillo, coordinador general de Investigación y Posgrado del IPN; Sergio Guevara Sada, director del Instituto de Ecología; Raúl Arias Lovillo, secretario Académico de la UV, y Antonio Aguilar Aguilar, secretario general de la UAM.