El antecedente más importante de las computadoras modernas
fue la ENIAC, presentada en 1946 en la Universidad de Pensilvania
por John Williams Mauchly y J. Presper, su construcción comenzó
en abril de 1943 y terminó aproximadamente tres años
después.
ENIAC
resultó ser una máquina de 30 toneladas de peso, que
en su interior contenía 500 mil juntas soldadas, conectando
los diferentes circuitos, 18 mil tubos de vacío, 70 mil resistores,
10 mil capacitores y seis mil conmutadores; pero este gigante electrónico
era capaz de realizar los cálculos matemáticos más
intrincados mil veces más rápido que la MARK I, además,
se constituyó como la primera computadora completamente electrónica
y con capacidad para almacenar programas.
Por
ejemplo, un problema que con una calculadora de escritorio tomaba
25 horas de trabajo manual, ENIAC podía resolverlo en más
o menos medio minuto.
En
1948, la IBM, con Thomas J. Watson como presidente, presentó
su computadora SSEC (Calculadora Electrónica de Secuencia
Selectiva) superior a la ENIAC. La historia de IBM y particularmente
de Watson es interesantísima, porque fue un hombre que siempre
estuvo dispuesto a creer en el futuro y a escuchar a sus colaboradores.
Hacia
1951, la compañía Remington-Rand, otra de las líderes
en este campo, presentó al mercado su modelo denominado UNIVAC,
que ganó el contrato para el censo de 1951 en los Estados
Unidos, por su gran capacidad considerablemente superior a todas
las máquinas desarrolladas hasta ese momento.
La
UNIVAC era un desarrollo original de una compañía
fundada por Mauchly y Eckert, quienes, debido a problemas financieros,
se vieron obligados a vender a la Remington-Rand, bajo la cual concluyeron
su proyecto UNIVAC.
Ésta
fue la primera computadora que se fabricó comercialmente,
así como la primera en utilizar un compiler (compilador o
autoprogramador) para traducir de lenguaje de programación
a lenguaje máquina.
Posteriormente
se realizaron una serie de proyectos e intentos de máquinas
para calcular que llegaron a desarrollar las primeras computadoras
o calculadoras de bolsillo o escritorio.
Mac
Intosh, Amiga, Hewlett-Packard, Dell e incluso Bell Computers han
sido compañías que desarrollaron máquinas para
diversas aplicaciones, pensando en que, cada usuario, podía
tener el mismo poder de cómputo para diferentes aplicaciones:
escribir más rápido, ordenar más rápido
y tener información más rápido para tomar decisiones
más eficientes y a menores costos.
Prácticamente
todos los ámbitos de nuestra vida moderna inciden y convergen
en una o varias computadoras y los fabricantes de las mismas estarán
dispuestos a satisfacer nuestras necesidades. Ahora lo interesante
será cerrar la brecha entre quienes tenemos acceso a las
máquinas y quienes no.
En
el siguiente Interfase hablaremos sobre algunas características
de la Red. La dirección
arcom@dino.uv.mx,
está
disponible para comentarios. Nos leemos en el siguiente.
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