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Corre la voz

Es recurrente en la historia de la literatura la estructuración del discurso en forma de diario, con una introducción donde se cuenta cómo llegó ese diario a las manos del narrador. Los pretextos utilizados por los diversos autores son múltiples y variados, pero todos persiguen el mismo objetivo: dar coherencia interna al relato que van a contar y hacerlo creíble. Veamos cómo ocurre en este caso: “Tuve, en mis años de escuela, dos magnífcos amigos, dos hermanos, cuyos nombres me reservaré; pero después de algunos años de separación perdí contacto con ellos. Hace algún tiempo me enteré de que uno se encontraba gravemente enfermo, así que aproveché un viaje a mi aldea para hacerle una visita. Vi sólo al hermano mayor, por lo que deduje que el enfermo no debía ser él sino el menor.” Con este breve párrafo en el que, de alguna manera, ya está planteada (o anticipada) toda la narración, comienza “Diario de un loco”. Y con algunas frases más se completa el marco en el que se encuadra el diario: “Después, con una sonrisa, me mostró dos cuadernos (el diario de su hermano) y me dijo que me podían servir para comprender la naturaleza de su mal. […] Estaba escrito de un modo incoherente y confuso, y contenía muchas afrmaciones absurdas; […] He copiado algunos fragmentos no del todo inconexos […] No he cambiado una sola palabra de este diario.”

Quien habla es, obviamente, el amigo de los dos hermanos, que es el narrador de quien se vale Lu Hsun para contar la historia. Así, con las mínimas pinceladas, las esenciales, se construye el decorado en el que se va a escenifcar la vida de este “loco”, autor y protagonista del diario. Es apenas una página, y en seguida aparecen los distintos momentos (o días) que dan la estructura formal a la narración, la cual, de esta forma fragmentaria, parece, incluso visualmente, escrita a desgarrones, pues hay capítulos de tres líneas, de seis, de dos páginas…, igual que los restos de un lienzo o un telón desbaratado.

En este relato, tan breve como estremecedor, todo está sometido al criterio de la brevedad: se trata de constreñir el lenguaje hasta hacernos sentir el dolor del protagonista, dejando, al mismo tiempo, a las palabras en libertad para que trasciendan la historia concreta y, mediante el recurso de la metáfora, sean extensibles al mundo y a la humanidad. Esta brevedad desoladora, esta densidad asfxiante, esta economía francamente dolorosa, nos muestra la sociedad china tal como es percibida por los ojos de un loco que la sufre en carne propia a través de la manía persecutoria llevada a su grado máximo: el canibalismo humano. Crueldad y crudeza que hacen que el lector, sintiéndose inmerso en una viscosidad de miradas expectantes y bocas ávidas, termine compartiendo la paranoia antropófaga del protagonista. “Esta mañana he permanecido, durante un buen rato, sentado tranquilamente. El viejo Chen me trajo la comida: un tazón de verdura y otro de pescado hervido al vapor. Los ojos del pescado eran blancos y duros y la boca estaba enteramente abierta, como la de los devoradores de hombres.” ¿Acaso no nos recuerda esto la famosa frase homo homini lupus (el hombre es un lobo para el hombre) del comediógrafo latino Plauto? Por esa

atmósfera espesa y dualmente opresiva, entre el delirio y la lucidez, tal como la considera una mente perturbada, mórbida, pero también consciente de que el mal de la sociedad es invención del ser humano, nos lleva de la mano el autor-protagonista del diario para revelarnos que el mundo mismo está regido por locos. A Lu Hsun le tocó vivir las convulsiones que sufrió China en el primer tercio del siglo XX. ¿Y qué otra cosa que “canibalismo” son si no aquellas guerras y las que seguimos padeciendo todos los días de nuestra vida? Al carecer de nombre y de tiempo, el “loco” puede ser cualquiera de nosotros en su peregrinar por esta vida tan sin sentido y tan maravillosa.

En la novelística contemporánea, comenta Pitol, el hombre ya no es la medida de todas las cosas, pues no sólo no crea ni domina su realidad, sino que incluso le resulta incomprensible. “El mundo puede ser entonces […] un camino al crepúsculo donde los signos están perdidos, donde cualquier voluntad redentora, cualquier intento cognoscitivo encuentra que su fn es la desesperación: tal es el mundo comprimido en los relatos de Chéjov y de Lu Hsun.”

Poco diré ya de los dos cuentos restantes. Ah Q, protagonista del segundo relato, es un “loco” que practica el masoquismo como mecanismo de defensa, como única salida, quizá, para soportar la vida en un entorno hostil y opresivo. El “loco” del tercer relato quiere liberarse de los antiguos mitos religiosos que tratan de someter a los individuos y a los pueblos con el fn de perpetuar un orden impositivo e irrefexivo. He aquí tres modelos en los que se muestra la locura humana; tres clases de locura o, mejor, tres maneras de captarla y manifestarla. “Los personajes de Lu Hsun”, dice Pitol, “oscilan entre un pasado inerte y un futuro incierto. El pasado se ha derrumbado, la vieja moral ha dejado de ser válida, el futuro aún no se vislumbra; no se ha creado una nueva ética que sustituya los principios caducados. El presente se tiende en el vacío. El hombre es oprimido por sistemas en los que ha dejado de creer. El mundo entonces se convierte en una fguración de la locura.”

He aquí un libro para la refexión, toda una propuesta para este año que comienza, con tanta guerra, con tanta saña, con tanta destrucción humana y del planeta: la verdadera locura del hombre, el hacerlo y el permitirlo, lo cual sólo puede conducir a la destrucción total. ¿Acaso cabe en nosotros la neutralidad?

México, D. F., 15 de enero de 2009

Publicado en La Jornada Semanal.

 

 
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José Luis Rivas Vélez fue designado Premio Nacional de Ciencia y Artes 2009 que obtuvo en el área de Lingüística y Literatura junto con Carlos Montemayor y Hugo Hiriart.
El maestro Rivas también es traductor, editor y fungió como director de la Editorial de la UV durante 14 años. Ha escrito Tierra nativa (1982), La transparencia del deseo (1986), Luz de mar abierto (1992), Ante un cálido norte (poesía reunida 1993-2003) y Un navío, un amor (2005); fue ganador del Premio Nacional de Poesía Aguascalientes (1986) y también del Xavier Villaurrutia en 1990. Recientemente la Editorial de la UV
Entre los galardonados se encuentre también la doctora Blanca Jiménez Cisneros, en el área de Tecnología y Diseño y Arturo Márquez en el área de Bellas Artes, ambos han sido homenajeados en la Feria Internacional del Libro Universitario.

Hernán Lara Zavala obtuvo el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska que se entrega en el marco de la Feria Internacional del Libro en el Zócalo de la Ciudad de México por su obra Península, península. El jurado estuvo integrado por la escritora catalana Rosa Regás, el novelista mexicano Alberto Ruy Sánchez y el escritor mexicano Álvaro Uribe quien decidió otorgar el galardón de manera unánime. El premio está dotado de 500 mil pesos y lo recibió de manos del Jefe de Gobierno Marcelo Ebrard.
Felicitamos a nuestro buen amigo Hernán Lara Zavala, quien fue jurado del Premio Latinoamericano a Primera Novela Sergio Galindo en su primera versión. Próximamente saldrá un libro de su autoría bajo el sello de la Editorial de la UV.

De nueva cuenta la Editorial de la UV tendrá una participación destacada en la FIL de Guadalajara con tres presentaciones de libros y un stand en el área de las editoriales de instituciones de educación superior. La fiesta del libro más importante de América Latina se realizará del 27 de noviembre al 6 de diciembre y tendrá como ciudad invitada a Los Ángeles, California con la literatura y amplia cultura de esa zona multicultural.
La Editorial de la UV dará a conocer la colección Narrativa de Sergio Galindo, que recopilará las obras del escritor xalapeño. La recopilación iniciará con La comparsa y Declive y serán presentadas por José Luis Martínez Morales, Godofredo Olivares, Víctor Hugo Vásquez Rentería y Agustín del Moral Tejeda. La presentación será el sábado 28 de noviembre a las 18:00 horas en el Salón Alfredo R. Placencia.
El domingo 29 de noviembre a las 12:00 horas, en el mismo lugar se presentará Y así por el estilo, de Joseph Brodsky, obra traducida por José Luis Rivas. Los comentarios estarán a cargo de Ramón Aguirre, Agustín del Moral Tejeda y el propio ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2009.
El lunes 30 de noviembre se presentarán los títulos recientes de la colección Sergio Pitol traductor con los comentarios de Darío Jaramillo, Rodolfo Mendoza y el maestro Pitol. La actividad se desarrollará a las 19:30 horas en el Salón Antonio Alatorre.

Herta Müller, escritora alemana nacida en Rumania, fue ganadora del premio Nobel de Literatura 2009. Desde comienzos de los 90 y con la traducción de sus obras a más de 20 idiomas, Müller se ha consolidado como una de las autoras más importantes del panorama literario internacional.
Nació el 17 de agosto de 1954 en Nitzkydorf, en el distrito rumano de Temeshwar. Debido a la censura en la publicación de su primer libro y al espionaje a la que fue sometida, Müller abandonó su patria en 1987 y se instaló en Berlín occidental. Tres años antes se había publicado ya en occidente su colección de relatos En tierras bajas (Niederungen)

Cinco meses después de su publicación en inglés, salió a la venta en español la única biografía "tolerada" del Gabo: Gabriel García Márquez: una vida, escrita por el británico Gerald Martin.
El trabajo de Martin reúne más de 300 entrevistas -entre familiares, políticos como Fidel Castro o Felipe González y escritores como Mario Vargas Llosa o Carlos Fuentes- y encuentros con García Márquez a lo largo de casi dos décadas.
Los funerales de la Mamá Grande fue el primer libro de García Márquez editado en México y se dio a conocer a través de la Editorial de la UV.

El 12 de noviembre es el Día Nacional del Libro. La celebración se instauró por decreto presidencial en 1979 para conmemorar el nacimiento de Sor Juana Inés de la Cruz acaecido en 1651 y con el propósito de divulgar el libro y la lectura en el país.